Costaron los 20 minutos de la clausura del evento $4.700 millones y hay un detrimento patrimonial de 1.900 millones, según el ente de control.

 

Denunció el contralor de Bogotá, Mario Solano Calderón, irregularidades en la ejecución del contrato de clausura del Mundial Sub 20, a cargo del Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD).

 

Afirmó el funcionario que después de haberse hecho la auditoría se encontró que del contrato, por un valor de $4.700 millones, hay un detrimento patrimonial de $1.900 millones que el IDRD no ha podido justificar hasta la fecha.

 

"Hay un contrato de alimentación por un día y la persona contratada lo da por 20 días y no por uno como debería ser. Al productor ejecutivo se le pagaron $26 millones por 40 días que tenía que dar la organización y por esa plata uno pensaría que si él tenía que hacer un viaje se pagaba con eso, sin embargo, el IDRD asume los viajes a Barranquilla", explicó.

 

Dijo asimismo el contralor que el IDRD no tiene por qué asumir esos gastos, y agregó que el Instituto pagó igualmente gastos de retrasos y de cambio de tiquete por valor de seis millones de pesos.

 

"Llama la atención cómo se contrata a una persona identificada como Jorge González Vásquez. El señor vive en una finca lejana, es un campesino que fue contratado para que hiciera que no lloviera. Para esto le pagaron cuatro millones de pesos", aseveró.

 

Abrió la Contraloría de Bogotá un proceso de responsabilidad fiscal contra la exdirectora del IDRD, Ana Camacho.