Irán, gran rival regional de Arabia Saudí, condenó los atentados suicidas contra mezquitas de tres ciudades saudíes, incluyendo la ciudad santa de Medina, indicó este martes la televisión estatal.
"No hay más líneas rojas para los terroristas. Los sunitas y los chiitas serán las víctimas salvo que estemos unidos", afirmó, en un tuit escrito en inglés, el ministro iraní de Relaciones Exteriores Mohammad Javad Zarif.
Irán "condena con firmeza el terrorismo en todas sus formas y en todo el mundo", declaró por su parte Bahram Ghasemi, el nuevo portavoz del Ministerio iraní de Relaciones Exteriores.
"El terrorismo no tiene fronteras y no cabe más solución que la cohesión y la unidad internacional y regional contra este fenómeno", añadió.
Irán chiita y Arabia Saudí sunita mantienen relaciones conflictivas y se oponen en todas las crisis regionales, sobre todo las de Siria y Yemen.
Riad rompió en enero sus relaciones diplomáticas con Teherán después del ataque de su Embajada en la capital iraní.
Los ataques del lunes, que dejaron al menos cuatro muertos, no han sido reivindicados, pero el modo en el que fueron perpetrados se asemeja al utilizado por el grupo yihadista Estado Islámico, responsable de varios ataques que han golpeado al reino en el último año.