Los 26.121 casos de personas reportadas como desaparecidas en México, desde 2006 a 2012, bajo la presidencia de Felipe Calderón, deben ser investigados para determinar en cuáles estuvieron involucradas autoridades y castigar a responsables, demandó el jueves Amnistía Internacional.

Luego de que el pasado martes la secretaría de Gobernación revelara una base de datos que incluye 21.121 reportes de personas desaparecidas o extraviadas, la organización defensora de los derechos humanos consideró que esto "resulta insuficiente".

El conocer esta base de datos "sólo confirma la inmensa tragedia que viven miles de familias y las escalofriantes dimensiones de las violaciones de derechos humanos que han permanecido ignoradas durante años", señaló un comunicado de AI en México.

Tras conocerse los números, añadió el texto, se deben "depurar" para determinar en qué casos se trata de desapariciones forzadas, es decir con la participación de fuerzas del orden o autoridades.

Se deben "iniciar investigaciones efectivas que permitan establecer el paradero de las víctimas, los motivos de su desaparición y a los responsables de estos hechos para que estos rindan cuentas ante la justicia", señaló Amnistía.

Human Rights Watch, otra organización defensora de los derechos humanos, divulgó la semana pasada un informe en el que documenta 149 casos de desaparición forzada en los últimos seis años.

Organizaciones defensoras de derechos humanos han recibido con críticas esta base de datos por considerar que carece de mayores detalles.

Al presentar la información, el gobierno mexicano subrayó que aún debe ser analizada para clasificar los distintos casos y determinar cuáles son de personas extraviadas, desapariciones forzadas, fallecimientos o de personas que ya fueron localizadas pero no se informó a las autoridades.

Distintas ONG advierten que las desapariciones en México se multiplicaron bajo el gobierno de Calderón, quien lanzó un operativo antidrogas con más de 50.000 militares y miles de policías federales.

La ola de violencia ligada al tráfico de drogas en los últimos seis años en México ha dejado más de 70.000 muertos, según cifras del gobierno.