Más de 30 personas murieron y decenas más desaparecieron en Afganistán, como consecuencia de inundaciones que tuvieron lugar tras días de lluvias torrenciales, indicaron el sábado las autoridades locales.
El agua invadió pueblos y algunos barrios de la ciudad de Chaghcharan, en la provincia de Ghor (centro), arrasando decenas de viviendas, indicó a la AFP el portavoz provincial Abdulhai Jatibi.
"Puedo confirmar que 24 personas murieron en estas inundaciones, pero también hay gente desaparecida", declaró.
La crecida dañó cientos de hectáreas agrícolas y dejo cientos de damnificados en esta empobrecida provincia, agregó.
En el noreste del país, en la provincia de Badajsan, las inundaciones, que se iniciaron tras dos días de lluvias torrenciales, dejaron por lo menos ocho muertos y destruyeron unas 100 casas, indicó Sanaulah Amiri, un funcionario de los servicios que tienen a su cargo intervenir cuando ocurren desastres de este tipo.
"Este tipo de lluvia y granizo no es común en esta época del año", por lo cual la gente no había tomado las debidas precauciones, agregó Amiri.
El invierno pasado fue el más riguroso de los últimos 15 años en Afganistán, donde se registraron nevadas inusualmente intensas. Los expertos pronosticaron que los ríos iban a crecer al derretirse la nieve, lo cual podía provocar inundaciones en el norte montañoso del país en la primavera boreal.
En mayo, inundaciones en la provincia de Sari Pul, vecina de la de Ghor, dejaron unos 50 muertos, en su mayoría mujeres y niños.
AFP