París anunció que fuerzas especiales francesas intervinieron el viernes en Agadez, en el norte de Níger, con el fin de obtener la liberación de personas que permanecían secuestradas tras un atentado suicida que dejó más de 20 muertos en un campo militar nigerino el jueves.
El Consejo de Seguridad de la ONU condenó el viernes en una declaración aprobada por unanimidad los atentados en Níger y pidió que sus responsables sean llevados ante la justicia.
El ejército de Níger vigilaba este viernes las instalaciones de Areva en el norte del país, después de que el islamista argelino Mojtar Belmojtar, dado por muerto por Chad, reivindicara los atentados contra el grupo nuclear francés Areva en Arlit y contra un campo militar nigerino en Agadez.
El grupo armado de Belmojtar había reivindicado los atentados el jueves, poco después de que también lo hiciera otro grupo armado islamista, el MUYAO. Posteriormente, este viernes, amenazó con llevar a cabo nuevos atentados.
En París, el ministro de Defensa, Jean-Yves Le Drian, anunció que las fuerzas especiales de su país "intervinieron (...) para apoyar a las fuerzas nigerinas", precisando que, según una "primera estimación", murieron "dos terroristas secuestradores" este viernes.
El jueves, el presidente francés François Hollande había afirmado que su país apoyará "todos los esfuerzos" que realice Níger para liberar a las personas retenidas por uno de los atacantes en Agadez. "No se trata de intervenir en Níger como lo hemos hecho en Malí, pero tendremos la misma voluntad de cooperar para luchar contra el terrorismo", declaró el mandatario.
No obstante, en la noche del jueves, el ministro nigerino de Defensa, Mahamadou Karidjo, había indicado a la AFP que no se produjo una "toma de rehenes" propiamente dicha, como había anunciado previamente el ministro del Interior, Abdou Labo, quien había dado cuenta de "cuatro o cinco" cadetes retenidos por un "kamikaze".
"No es una toma de rehenes y no hay rehenes. Era alguien que quería huir y lo redujimos", afirmó Karidjo. "Todo el mundo fue reducido, la operación terminó", insistió.
Para el ministro de Defensa francés, el objetivo de los yihadistas "era que Malí se convirtiera en un santuario islamista, lo cual no ocurrirá. Ahora hay que evitar que haya idénticos riesgos en el norte de Níger o una parte de Chad", agregó.
Por su parte, en un comunicado difundido el viernes en un portal internet islamista que también amenaza a Francia y a los demás países que tienen tropas en Malí, el grupo armado de Belmojtar afirmó que llevará a cabo "nuevos ataques" en Níger.
El grupo amenaza con "desplazar la guerra (a Níger) si este país no retira sus tropas de mercenarios" de Malí.
"Que Francia vaya sabiendo que lo único que logró es una victoria en los medios (de comunicación) en su cruzada" en Malí, agregó.
"Actualmente, Francia intenta huir (de Malí) y desplegar mercenarios en su lugar", añadió.
El jueves, el portavoz de este grupo, "Los que firman con sangre", citado por la agencia en línea mauritana Alakhbar, había afirmado que Belmojtar "supervisó" los atentados en el norte de Níger, llevados a cabo conjuntamente con el grupo islamista maliense MUYAO (Movimiento para la Unicidad y la Yihad en África del Oeste), que ya los había reivindicado previamente.
"Atacamos a Francia y a Níger por su cooperación con Francia en la guerra contra la sharia (la ley islámica)", afirmó el MUYAO.
Belmojtar, un antiguo jefe de Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI), dejó este grupo a fines de 2012 para crear su propio movimiento, "Los que firman con sangre", cuya primera acción importante fue la toma de rehenes masiva el pasado mes de enero, en la central gasífera de In Amenas, en el sur de Argelia, la cual provocó una intervención de las fuerzas especiales argelinas, con un saldo total de decenas de muertos.
Francia había confirmado, el 23 de marzo, la muerte de Abu Zeid, pero no la de Belmojtar, también conocido como "El Tuerto", anunciada por Chad.
AFP.