EN ARABIA SAUDITA, el permiso acordado a las mujeres para que puedan viajar sin la autorización de un "tutor" causó un gran debate, entre los defensores que ven en la iniciativa un progreso histórico y quienes, en cambio, creen que es "contraria al islam".
Las sauditas de más de 21 años podrán obtener el pasaporte y viajar al extranjero sin una autorización previa de su "tutor" (padre, marido, hijo u otro pariente), anunció el Gobierno.
Otros cambios que, sin desmantelarlo, debilitan el sistema del "tutor" obligatorio para las mujeres incluyen la posibilidad de que éstas declaren oficialmente un nacimiento, un matrimonio o un divorcio, y que puedan ser titulares de la autoridad parental de sus hijos menores, unas prerrogativas que hasta ahora estaban reservadas a los hombres.
Para la princesa Rima Bint Bandar, primera mujer embajadora de Arabia Saudita en Estados Unidos, nombrada en febrero, se está escribiendo una nueva página de "la Historia".
"Es un enfoque [...] que creará incontestablemente un cambio", consideró en Twitter. La decisión generó una ola de júbilo en las redes sociales, donde las etiquetas "No Guardianship Over Women Travel" ("Sin vigilancia en los viajes de las mujeres") o "This is our time" ("es nuestro momento") ganando popularidad.
También se publicaron muchos "memes" (montajes de fotos humorísticos) de mujeres corriendo hacia el aeropuerto. Las reformas forman parte de la serie de medidas de liberalización del príncipe heredero Mohamed Bin Salmán, hombre fuerte del reino ultraconservador que trata, además, de modernizar la economía, muy dependiente de los hidrocarburos.
La más emblemática de estas reformas fue la que permitía a las mujeres conducir, en vigor desde junio de 2018. Las mujeres también fueron autorizadas recientemente a asistir a partidos de fútbol y a acceder a empleos antaño reservados a los hombres.
Un diario progubernamental, Saudi Gazette, elogió la libertad de viajar sin el permiso de ningún hombre como "un paso de gigante para las mujeres sauditas".
"Los sueños de algunas mujeres se rompieron a causa de que no podían dejar el país para [...] estudiar en el extranjero, responder a una oferta de empleo o incluso huir, si así lo deseaban", comentó en Twitter la empresaria saudita Muna AbSulayman.
Con todo, los críticos creen que las reformas no son suficientes y destacaron que el sistema del "tutor masculino" dista mucho de haber sido abolido.
En los últimos meses, se registraron varios casos de evasiones al extranjero de jóvenes sauditas que se declaraban víctimas de ataques violentos por parte de sus "tutores".
A principios de 2019, una saudita de 18 años, Rahaf Mohamed Al Qunun, obtuvo el asilo en Canadá tras haber sido detenida, en un primer momento, en el aeropuerto de Bangkok. La embajada de la capital tailandesa fue objeto de críticas por, presuntamente, haber intentado repatriar a la joven en contra de su voluntad.
"Las nuevas normativas [...] limitarán también la interferencia del Estado en la esfera privada", indicó en Twitter Eman Alhusein, una investigadora saudita.
Las autoridades sauditas aseguraron estar comprometidas con la lucha contra los abusos de los tutores, pero advirtieron que el sistema deberá desmantelarse poco a poco, para evitar una respuesta violenta de los más conservadores.
Algunos denunciaron que el cambio es "contrario al islam".
Un internauta tuiteó la imagen de una mujer con velo de la cabeza a los pies, arrastrándose bajo una alambrada y apareciendo ligera del otro lado.
Arabia Saudita es criticada por su comportamiento en materia de derechos humanos, entre otros casos en un juicio en curso contra 11 mujeres activistas que llevan tiempo reclamando el fin del sistema de tutores.
La más famosa de esas activistas, Lujain Al Hathlul, cumplió sus 30 años en la cárcel la semana pasada. Tanto ella como otras activistas, acusadas de haber contactado con medios extranjeros, diplomáticos y organizaciones de defensa de los derechos humanos, aseguran haber sido torturadas y acosadas sexualmente durante su detención.
Amnistía Internacional instó a Riad a "poner fin a las persecuciones de las activistas por los derechos de las mujeres" y a liberar "inmediatamente a las que están detenidas por sus actividades pacíficas".