Un hombre de unos 40 años de edad fue detenido por terrorismo tras el ataque con arma blanca que causó varios heridos en un centro comercial de Mánchester, en el norte de Inglaterra.
El agresor, "armado con un gran cuchillo", actuó solo y su motivación aún no se conoce, dijo un responsable de la Policía de Mánchester, Russ Jackson, en una conferencia de prensa.
"El hombre empezó a acercarse bruscamente y a atacar a la gente con el cuchillo", detalló. "Es un ataque brutal y extremadamente aterrador para todos los que lo presenciaron", añadió.
El ataque se produjo poco antes del mediodía e hizo que un importante dispositivo policíal se desplegara rápidamente en el lugar de los hechos. Un hombre de unos 40 años fue detenido y está siendo interrogado. Varios videos publicados en las redes sociales mostraban a varios agentes controlando al sospechoso.
La Policía explicó que dada "la localización del incidente y su naturaleza, los agentes de la policía antiterrorista están investigando". Sin embargo, no se descarta ninguna pista, añadió.
Al menos cinco personas resultaron heridas y fueron llevadas a un hospital, aclararon los servicios de auxilio.
Tres personas, dos mujeres en situación "estable" y un hombre de 50 años, fueron llevadas al hospital. "Aunque se trata de heridas bstante graves (...) ninguna pone sus vidas en peligro, felizmente", indicó Russ Jackson.
El primer ministro británico, Boris Johnson, se dijo "conmocionado" en un mensaje publicado en la red social Twitter, y agradeció la rápida intervención de fuerzas del orden y equipos médicos.
El fantasma de mayo de 2017
Según los medios de comunicación locales, el centro comercial de Arndale, donde tuvieron lugar los hechos, fue evacuado.
Un testigo, llamado Jordan, contó a la agencia de prensa local PA que vio a un hombre "armado con un cuchillo que se precipitaba hacia varias personas". Poco después, "los agentes de seguridad ordenaron el cierre de todas las tiendas y pidieron a los clientes que se dirigieran hacia una parte del centro comercial".
Freddie Houlder, de 22 años, explicó que "oyó gritos en el exterior" de la tienda en la que se encontraba. Una mujer entró, muy nerviosa, diciendo que un hombre había intentado apuñalarla. En un principio, la mujer pensó que era un cuchillo falso, pero "rompió a llorar" cuando la policía le dijo que era un arma de verdad.
"Por suerte, tenía una chaqueta bastante gruesa" y el agresor no logró su objetivo, explicó este testigo.
Al parecer, el hombre intentaba agredir a la gente que pasaba a su lado, completamente al azar.
Mánchester no ha olvidado el atentado yihadista ocurrido en la ciudad el 22 de mayo de 2017, cuando un hombre llamado Salman Abedi hizo estallar una bomba a la salida de una gran sala de conciertos en la que había actuado la joven estrella del pop Ariana Grande.
Veintidós personas murieron en este ataque suicida reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), entre ellas siete niños, y 260 personas resultaron heridas.
Una investigación parlamentaria concluyó que los servicios de inteligencia británicos dejaron escapar varias ocasiones para impedir que el yihadista pasara a la acción y cometiera el atentado