UNA “rápida transición negociada” en Venezuela para organizar elecciones presidenciales y legislativas en ese país pidió el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, para lo que planteó una renovación tanto del Consejo Nacional Electoral (CNE) como del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
Pompeo consideró que "Venezuela se enfrenta a una encrucijada en 2020" en la que "una rápida transición negociada a la democracia es la vía más eficaz y sostenible hacia la paz y la prosperidad". "Las negociaciones podrían abrir una salida a la crisis mediante un gobierno de transición que organice elecciones libres y justas", afirmó.
En este sentido señaló que el año recién iniciado supone una "oportunidad" para que pueda haber elecciones "libres y justas" tanto a la jefatura de Estado como a la Asamblea Nacional, el único órgano controlado a día de hoy por la oposición e inhabilitado 'de facto' por las resoluciones judiciales del TSJ.
El diálogo que sugiere ahora el Gobierno de Estados Unidos contrasta con la postura mantenida por el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, durante estos últimos meses, en los que se ha negado a cualquier concesión alegando que el régimen de Maduro solo busca ganar tiempo. El Ejecutivo venezolano, por su parte, presume de unas negociaciones a las que por ahora solo se ha sumado un sector minoritario de la oposición.
El jefe de la diplomacia norteamericana, que esta misma semana reiteró su apoyo a Juan Guaidó como presidente legítimo de Venezuela, ha admitido el reto que supone "reconstruir las instituciones y las infraestructuras" que han sido "aniquiladas" por el "brutal régimen" de Nicolás Maduro.
El presidente venezolano, que en 2018 fue reelegido en unos comicios cuestionados por la comunidad internacional, descarta por ahora cualquier paso atrás y, en cambio, aboga por renovar la Asamblea Nacional tal como estaba previsto este mismo año.
El Departamento de Estado norteamericano ha resumido sus reivindicaciones en un documento en el que también reclama que los comicios estén abiertos "a todos los partidos y candidatos", lo que requeriría la retirada de las "restricciones" impuestas sobre opositores. Washington ha apelado a la "seguridad" de "todos los que han huido del país" y la liberación de los "presos políticos".
Según Pompeo, "la comunidad internacional desempeña un papel clave" en todo este proceso, en el que también sería necesaria una "observación electoral independiente, sin restricciones indebidas", que incluya a "expertos" tanto venezolanos como extranjeros
Entre tanto el líder opositor Guaidó, ratificado como presidente del Parlamento venezolano, busca recuperar su poder de convocatoria con asambleas ciudadanas y protestas en su intento por expulsar al mandatario Nicolás Maduro del poder.
Para ello llamó a asambleas ciudadanas en el este de Caracas, que se realizaron anoche, como parte de las "actividades de calle" que había convocado para ayer y hoy.
Además, convocó a una protesta para el sábado y otra manifestación el martes hasta el Palacio Legislativo, en el centro de la capital.
"La dictadura tratará de responder y debemos levantarnos", escribió en Twitter el jefe parlamentario momentos después de jurar el martes como "presidente encargado" del país al frente del Parlamento.
Guaidó busca avivar nuevamente los ánimos opositores después de ser incapaz de reeditar en los últimos meses las multitudinarias protestas de principios de 2019