El balance de muertos por la tormenta tropical Tembin en el sur de Filipinas ascendió a 182 a primera hora del domingo, informó la policía, precisando que otras 153 personas seguían desaparecidas.
El balance no deja de aumentar. Las últimas cifras de la policía incluyen 36 víctimas cuyos cuerpos fueron recuperados el sábado de las aguas del río Salong, en Mindanao.
La tormenta provocó inundaciones y aludes de tierra.
Rando Salvacion, un responsable de la policía de la ciudad de Sapad, declaró a la AFP que los cuerpos rescatados en Salong provenían de la localidad de Salvador, río arriba.
Las autoridades locales indicaron por su parte haber recuperado otros 17 cuerpos, más río arriba.
Sapad y Salvador se sitúan en la provincia de Lanao del Norte, en el noroeste de la isla, una de las más afectadas por Tembin.
"Se alertó sobradamente a la población. Pero como los tifones son poco comunes aquí, los vecinos no nos tomaron en serio", se lamenta el responsable de la policía de Salvador, Wilson Mislores.
Una veintena de tifones y tormentas golpean cada año Filipinas, pero Mindanao, la gran isla del sur de unos 20 millones de habitantes, generalmente se salva.
Más de 120.000 habitantes de la isla tuvieron que huir de sus hogares.
Según la policía, 19 personas fallecieron también en el pueblo montañoso de Dalama, cerca de la ciudad de Tubod.
"El río comenzó a crecer y la mayoría de las casas [de Dalama] fueron arrasadas. El pueblo ya no existe", declaró por teléfono a la AFP Gerry Parami, de la policía de Tubod.
Policías, soldados y voluntarios trabajan con ayuda de palas para intentar encontrar cuerpos sepultados por el lodo y los escombros en este pueblo agrícola de unas 2.000 personas, añadió Gerry Parami.
- Rescates difíciles -
En otros lugares, el lodo y las rocas arrastrados por las inundaciones sepultaron unos cuarenta hogares en la ciudad de Piagapo, donde murieron al menos 10 personas, según Saripada Pacasum, un representante de la defensa civil de la provincia de Lanao del Sur.
"Enviamos a los servicios de rescate pero avanzan lentamente debido a las rocas", indicó.
La tormenta provocó igualmente cortes de electricidad y de comunicación, haciendo más difícil establecer el número de víctimas.
La situación era especialmente preocupante en la península de Zamboanga donde, según la televisión local, al menos tres localidades sufrieron inundaciones.
Según la policía, el número de víctimas aquí asciende a 28 muertos y 81 desaparecidos, tras los torrentes de lodo y el derrumbe de rocas en las localidades costeras, como Sibuco.
"Es probable que hayan ignorado las advertencias de las autoridades" sobre los riesgos de inundaciones, declaró el alcalde de Sibuco, Norbideiri Edding, en la radio de Manila DZMM.
Harry Roque, el portavoz del presidente filipino Rodrigo Duterte, aseguró una ayuda sostenida a las regiones afectadas. Romina Marasigan, la portavoz del Consejo Nacional a cargo de este tipo de catástrofes, habló por su parte de una situación "terriblemente difícil".
La tormenta tropical alcanzará el sábado por la tarde la isla de Palawan, al oeste de Mindanao, declaró el servicio meteorológico filipino.
Tembin llega menos de una semana después del paso de la tormenta tropical Kai-Tak que devastó el centro del país, dejando 54 muertos y 24 desaparecidos.
Cientos de personas fallecieron en julio de 2014 al paso del tifón Rammasun ('Dios del trueno' en tailandés), pese a la evacuación de casi 400.000 personas y la paralización de Manila.
Haiyan, uno de los tifones más violentos, golpeó las islas del centro de Filipinas en noviembre de 2013, con vientos de más de 315 km/h. Olas gigantes, como las de un tsunami, devastaron todo a su paso. La catástrofe dejó más de 7.350 muertos o desparecidos.