Rusia mantiene el apoyo a Cuba frente a las hostilidades de Estados Unidos, y la ayudará a fortalecer su economía frente a ataques externos, aseguró el miércoles el canciller Serguei Lavrov, de visita en la isla.

"Vamos a seguir apoyando a Cuba en todo, no solo moralmente o políticamente, no solo a través del desarrollo de la cooperación técnico-militar sino también promoviendo activamente el comercio, proyectos económicos que permitan a la economía de este país ser más firme ante ataques externos. Confió en que lo vamos a lograr", dijo el jefe de la diplomacia rusa, tras una reunión con su par cubano Bruno Rodríguez.

Lavrov rechazó las medidas de Estados Unidos contra la isla socialista, que endurecen el embargo que Washington aplica desde 1962 y que complica el intercambio comercial de La Habana con el resto del mundo, asfixiando su economía.

Entre estas medidas está la reciente activación del título III de la denominada Ley Helms-Burton, que permite demandar en tribunales estadounidenses a empresas extranjeras que administren bienes nacionalizados en Cuba por la revolución de Fidel Castro.

"Todos los artículos de esta ley son ilegales, contradicen al derecho internacional. Cada año se vota (en la Asamblea General de la ONU) contra el embargo. Esa resolución cuenta con 190 votos cada año", sostuvo Lavrov.

La administración de Donald Trump asegura que con sus medidas busca un cambio del sistema de gobierno en Cuba, donde el Partido Comunista es el ente rector del país, en tanto acusa a las autoridades cubanas de perseguir a sus opositores y de apoyar militarmente a la Venezuela de Nicolás Maduro.

Asimismo, ha aplicado multas a algunas entidades financieras que facilitan las operaciones entre la isla y el extranjero.

"La cooperación de Cuba con Venezuela es y será invariable, con el gobierno legítimo de Nicolás Maduro y la unión cívico militar de su pueblo", dijo por su parte el canciller Bruno Rodríguez, quien agradeció la visita de su socio.

Sostuvo que Rusia y Cuba concentrarán esfuerzos para enfrentar la "epidemia de medidas coercitivas unilaterales" aplicadas por Estados Unidos, "que constituyen una flagrante violación del derecho internacional, de la Carta de Naciones Unidas y generan amenazas a la paz y seguridad internacionales".

Para Lavrov, el interés a largo plazo de Estados Unidos no debe ser "dañar sus relaciones con todos, lanzando ultimatos, exigiendo el pago inmediato de multas y apropiarse de recursos financieros (...) Su interés debe ser garantizar las relaciones con sus socios".

Tras culminar su visita a Cuba, Lavrov tiene en su agenda escalas en Brasil y Surinam.