La procuradora general de Brasil, Raquel Dodge, incriminó este jueves al actual presidente Michel Temer por corrupción y lavado de dinero en un proceso legal relacionado con anomalías en el sector portuario.
De acuerdo a un comunicado de la Procuraduría brasileña, Temer se encuentra bajo investigación por presuntamente recibir sobornos a cambio de formular un decreto en 2017 que avalaba la prórroga de dos contratos portuarios por hasta 70 años que favorecieron al Grupo Rodrimar.
En la investigación también están implicados el jefe de dicho grupo, Antonio Celso Grecco, y el exasesor de la presidencia Rodrigo Roucha Lores.
Por su parte, la Presidencia de Brasil indicó que probará que no hubo irregularidades y ninguna compañía se benefició de manera indebida.
Temer enfrenta una tercera acusación desde que asumió el liderazgo de Brasil en agosto de 2016.
Michel Temer solo podrá ser juzgado siendo presidente si la Cámara baja del Congreso vota para admitir que se realice un juicio. Esto difícilmente ocurrirá.
El saliente mandatario entregará el cargo el 1 de enero al líder de ultraderecha Jair Bolsonaro.