El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, nombró este lunes al general Carlos Leal Tellería como nuevo ministro de alimentación, un sector especialmente castigado por la colosal crisis económica que atraviesa el país.
"He designado al M/G Carlos Leal Tellería como el nuevo Ministro del Poder Popular para la Alimentación. Asumirá el mando en esta nueva etapa, en la que debemos perfeccionar los mecanismos para garantizarle el alimento al pueblo venezolano. ¡A la Batalla!", escribió el mandatario en Twitter.
Leal Tellería reemplazará a otro militar, el general Luis Alberto Medina Ramírez, quien estuvo al frente de la cartera desde agosto de 2017.
Después de años de un fuerte desabastecimiento, en que los venezolanos debían peregrinar de fila en fila para conseguir insumos básicos como harina, azúcar o café, los anaqueles de los mercados comienzan a estar ocupados.
Pero con una economía reducida a la mitad desde 2014 y una inflación proyectada por el FMI en 10.000.000% para este año, los precios de la comida resultan impagables para una significativa parte de la población.
El gobierno acusa de las distorsiones económicas a Washington, que ha reforzado su paquete de sanciones contra Venezuela para presionar la salida de Maduro del poder, mientras la oposición responsabiliza a la corrupción y las malas políticas económicas.
El ministerio de Alimentación distribuye alimentos a precios subsidiados en zonas populares, bajo un programa llamado Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), que la oposición denuncia como un "mecanismo de control social".
La crisis ha empujado a emigrar a más de 3 millones de venezolanos en los últimos años, según la ONU, que asegura que un cuarto de los 30 millones de venezolanos necesitan ayuda humanitaria urgente.
El ingreso de la asistencia a Venezuela ha sido parte central de la pugna por el poder desatada en enero entre el mandatario socialista y el líder opositor Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por Estados Unidos y más de 50 países.
Leal Tellería estaba a cargo hasta ahora de la Milicia Nacional Bolivariana, un cuerpo de civiles que reciben entrenamiento militar y al que Maduro apuesta para reforzar la defensa de su gobierno en caso de conflicto o intervención extranjera.
Durante un acto para conmemorar el aniversario del golpe de Estado de 2002 contra el fallecido presidente Hugo Chávez el pasado sábado, Maduro celebró el crecimiento de estas milicias, que asegura cuentan con 2,2 millones de integrantes, y que aspira alcancen los 3 millones al final del año.