En el marco de la investigación por el presunto delito de lavado de activos contra la expresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, la exmandataria presentó un documento ante el juez del caso, Claudio Bonadio, en el que aseguró que: “podrán excavar toda la Patagonia, nunca van a encontrar nada con lo que involucrarme”.
“Podrán seguir vigilando mis movimientos y los de mi familia, escuchar de manera clandestina mis conversaciones telefónicas o excavar toda la Patagonia argentina o donde mejor se les ocurra, que nunca van a encontrar nada con lo que involucrarme, porque jamás me apoderé de dinero ilícito alguno", subrayó el texto entregado por Fernández.
La expresidenta compareció este martes ante los tribunales de Buenos Aires en el marco de la causa conocida como ‘la Ruta del Dinero K’, en el que se habrían blanqueado unos USD 60 millones entre 2010 y 2013.
Este lunes, el juez Bonadio le abrió un proceso judicial a la expresidenta por ser la presunta líder de una asociación ilícita utilizada para la recaudación de sobornos a cambio de su mediación en la asignación de contratos de obras públicas en su gobierno.
Según la investigación adelantada por el juez, el dinero de las coimas podría superar los USD 200 millones. En dicho tramado están involucrados exfuncionarios de su gobierno y poderosos empresarios del país.
Cristina Fernández es procesada en seis casos, la mayoría por presunta corrupción.
En febrero del año que corre, el juez Bonadio también llamó a juicio oral a la expresidenta por haber avalado un memorándum para dotar de impunidad a los iraníes acusados de ejecutar el acto terrorista contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) de Buenos Aires en 1994, donde murieron 86 personas y 300 resultaron heridos.
Por este caso, Fernández tiene suspendida una orden de detención debido a su fuero parlamentario.
En carácter de coautora del delito de traición a la patria, Bonadio solicitó la prisión preventiva contra Fernández y le pidió al Congreso que le retire sus privilegios parlamentarios.
Además, el 4 de abril de 2017, el mismo juez procesó a la exjefa de Estado y ordenó el embargo de USD 2.890.000 de su fortuna. Para evadir esta sanción, la expresidenta decidió ceder buena parte de su capital a sus hijos, Máximo y Florencia Kirchner.
Fernández -hoy senadora de Argentina- niega su participación en todos estos delitos.