
El ministro de Seguridad Nacional de Israel, el ultraderechista Itamar Ben Gvir, ha amenazado con retirar a su partido, Otzma Yehudit, de la coalición gubernamental que lidera el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, si se aprueba el alto el fuego acordado con el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
Ben Gvir ha advertido que el acuerdo permite la liberación de "cientos de terroristas asesinos", la retirada de las tropas israelíes del corredor Filadelfia y el cese de los combates para eliminar definitivamente a Hamás, por lo que supondrá "revertir" todos los logros alcanzados por Israel.
Asimismo, ha resaltado que el acuerdo no conduce a la liberación de todos los secuestrados por las milicias palestinas "y sella el destino del resto". Ben Gvir también ha exigido poner fin al envío de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza.
El ministro ultraderechista ha explicado que, en caso de que el gabinete apruebe el acuerdo, si después de la implementación de la primera fase se reanuda la guerra, tanto él como su partido volverán a la coalición gubernamental, según ha recogido el diario 'Haaretz'.
Ben Gvir ya pidió el martes al ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich -líder de Sionismo Religioso- que dimita del cargo y que se sume a las exigencias a Netanyahu para no firmar el acuerdo. Poco después de las palabras del ministro ultraderechista, el partido gobernante, el Likud, ha afirmado en un comunicado que cualquiera que "disuelva" la coalición "será recordado como una desgracia eterna".
"Contrariamente a los comentarios de Ben Gvir, el acuerdo existente permite a Israel volver a luchar bajo garantías estadounidenses, recibir las armas y los medios de guerra necesarios, maximizar el número de rehenes vivos que serán liberados, mantener el control total del corredor Filadelfia", ha enumerado.
El principal líder de la oposición de Israel, Yair Lapid, ha reiterado su apoyo a Netanyahu en caso de que Otzma Yehudit abandone la coalición. "Obtendrás toda la seguridad que necesites para el acuerdo. Esto es más importante que cualquier desacuerdo que hayamos tenido", ha señalado en redes sociales.
Entre tanto, Estados Unidos dijo que "confía" en que el alto al fuego entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza empiece el domingo, pese a los bombardeos israelíes de las últimas horas, y las acusaciones cruzadas de última hora en torno al acuerdo anunciado.
La tregua entraría en vigor el domingo e implicaría el intercambio de rehenes israelíes por prisioneros palestinos, que una vez finalizado pondría fin a la guerra de más de 15 meses que ha dejado decenas de miles de muertos en Gaza.
Según un alto funcionario israelí, el gobierno israelí prevé reunirse hoy para votar el acuerdo, para el que el primer ministro, Benjamin Netanyahu, debería obtener una mayoría pese a la oposición de ministros de extrema derecha.
Egipto, que interviene como mediador en el conflicto junto a Estados Unidos y Catar, reclamó que el acuerdo se ponga en marcha "sin demora".