El secretario general de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, llamó el lunes a todos los países miembros a trabajar en conjunto para "suprimir la amenaza terrorista mundial en Afganistán".
"La comunidad internacional debe unirse para asegurarse que Afganistán nunca más sea usado como plataforma o refugio de organizaciones terroristas", dijo Guterres durante una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad del organismo sobre la crisis.
La reunión fue convocada apresuradamente en la sede en Nueva York después de que los militantes talibanes entraran en la capital, Kabul, el domingo, lo que llevó al presidente afgano Ashraf Ghani a huir al extranjero.
"Hago un llamamiento al Consejo de Seguridad y a la comunidad internacional en su conjunto para que se mantengan unidos, trabajen juntos y actúen juntos", añadió Guterres.
Instó a las naciones a "utilizar todas las herramientas a su disposición para suprimir la amenaza terrorista global en Afganistán y garantizar que se respeten los derechos humanos básicos".
Los comentarios de Guterres se produjeron en momentos en que los combatientes talibanes, victoriosos, patrullaban en Kabul tras un sorprendente y rápido final de la guerra de 20 años en Afganistán.
Miles de personas se agolparon en el aeropuerto de la ciudad tratando de huir de la temida línea dura de un régimen islamista tradicional del grupo. En ese sentido, Guterres dijo que los afganos "merecen todo nuestro apoyo".
- Noticia relacionada: Pánico en Kabul tras toma del poder de los talibanes en Afganistán
"Los próximos días serán cruciales. El mundo está mirando. No podemos ni debemos abandonar al pueblo de Afganistán", expresó.
En Ginebra, un grupo de expertos independientes en derechos humanos del organismo instó al Consejo de Seguridad a tomar medidas en virtud del capítulo siete de la Carta de la ONU, que permite la acción militar para restablecer la paz y la seguridad internacionales.
Pero eso no está sobre la mesa en Nueva York, donde se espera que el Consejo emita una declaración conjunta más tarde, dijeron los diplomáticos.
Guterres instó a la comunidad internacional a "hablar con una sola voz para defender los derechos humanos en Afganistán". Al respecto, destacó que era "esencial que se protejan los derechos de las mujeres y niñas afganas que tanto costó conseguir".
Gran Bretaña fue uno de los países que insistió en que los talibanes "cumplan sus promesas de proteger y defender los derechos humanos, incluidos los de las mujeres, las niñas y las minorías".
"Si los talibanes siguen abusando de los derechos humanos básicos, no pueden esperar disfrutar de ninguna legitimidad a los ojos del pueblo afgano, ni de la comunidad internacional", dijo el representante permanente adjunto James Kariuki.
Durante la reunión, el embajador de Afganistán ante la ONU, Ghulam M. Isaczai, instó a las naciones a "declarar inequívocamente" que no reconocerían un gobierno talibán.
China dijo que está dispuesta a mantener relaciones "amistosas y de cooperación" con el próximo gobierno de Afganistán, mientras que Moscú confirmó que ha "establecido contactos de trabajo con representantes de las nuevas autoridades".
Pakistán se quejó de que India, que actualmente ocupa la presidencia rotatoria del Consejo, rechazara su petición de intervenir en la reunión.