LOS PAÍSES europeos, entre ellos Alemania, trataron de calmar el fervor de Ucrania después de que su presidente Petro Poroshenko pidiera a la OTAN desplegar buques para hacer frente a Rusia en el mar de Azov.
Durante un foro económico germano-ucraniano, la canciller alemana, Angela Merkel, pidió que Kiev "se mantuviera prudente" y aseguró que solo era posible "resolver las cosas permaneciendo razonable, discutiendo los unos con los otros".
El presidente ucraniano Petro Poroshenko pidió a la OTAN una respuesta firme frente a lo que considera una agresión de Rusia, que apresó el domingo tres buques de la Marina ucraniana en el mar Negro, cerca de la península de Crimea, anexionada por Rusia en 2014.
Es la primera confrontación militar abierta entre Moscú y Kiev desde esta anexión y desde el inicio de un conflicto armado en el este de Ucrania que dejó más de 10.000 muertos.
Poroshenko pidió a los países de la OTAN que desplieguen buques en el mar de Azov para apoyar a Kiev en su pulso con Moscú. "Alemania es uno de nuestros aliados más cercanos y esperamos que países en la OTAN estén dispuestos a enviar buques al mar de Azov para ayudar a Ucrania y garantizar la seguridad" en la zona, declaró al diario alemán Bild.
Una llamada que quedó sin respuesta. "No puede haber solución militar a estas confrontaciones", insistió la canciller alemana.
La prudencia de Merkel coincide con la de otros líderes europeos. Aunque la Unión Europea expresó su consternación "por el uso de fuerza de Rusia", los 28 no consideran nuevas medidas para sancionar a Rusia.
Serias diferencias oponen a los Estados europeos, según explicaron a la AFP fuentes diplomáticas. La adopción de nuevas sanciones solo puede ser por unanimidad. Polonia apoya la idea, pero Francia y Alemania creen que es prematuro.
En una declaración conjunta, los 28 Estados miembros pidieron sin embargo "garantizar un paso libre y sin trabas en el estrecho de Kerch en dirección y desde el mar de Azov, de conformidad con el derecho internacional".
"En ese contexto, pedimos también de manera firme que Rusia libere sin condiciones y sin retraso los navíos capturados, su tripulación y su equipamiento", agregaron.
El tema estará en el centro de las reuniones de la OTAN la próxima semana en Bruselas aunque la organización permanece prudente: "Ya existe una fuerte presencia de la OTAN en el mar Negro, y seguiremos evaluándolo", declaró la portavoz Oana Lungescu a la AFP.
Los 24 marineros ucranianos capturados por Rusia, entre ellos tres heridos, detenidos hasta el 25 de enero fueron trasladados a la prisión de Lefortovo en Moscú.
Ucrania instauró la ley marcial el miércoles por 30 días en diez regiones fronterizas y costeras.
Por su parte, Vladímir Putin defendió a los guardias costeros rusos e insistió que habían "hecho su deber con precisión". Calificó el enfrentamiento de "provocación" y acusó a Petro Poroshenko de planear el choque con fines electorales.
El Kremlin también negó haber cerrado el estrecho de Kerch. "No tengo conocimiento de ninguna restricción en este momento. Al contrario, el estrecho está abierto y funciona normalmente", declaró a los periodistas el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Según el ministro ucraniano de infraestructuras, Volodymyr Omelian, 18 navíos ucranianos esperan el permiso para pasar del mar Negro al mar de Azov, clave para las exportaciones de cereales o acero producidos en el este de Ucrania y otros nueve barcos esperan pasar en sentido contrario. "Los puertos ucranianos del mar de Azov (...) están bloqueados por la federación Rusa", agregó.