Con más de 3.400 fallecidos, España se convirtió este miércoles en el segundo país con más decesos por el coronavirus por delante de China, paìs con el cual cerró un contrato de 432 millones de euros para adquirir material sanitario.
En una semana que ya se auguraba "muy dura", España cuenta por cientos sus muertos diarios: 462 el lunes, 514 el martes y 738 este miércoles, cifra récord en el país.
China, lugar de origen de la pandemia, registraba hasta la fecha 3.281 víctimas mortales y solo Italia, con 6.820 decesos en su último balance, se sitúa por delante de España.
Desde el 14 de marzo, los casi 47 millones de españoles viven confinados en sus casas, que solo pueden abandonar para ir a trabajar si no pueden hacerlo a distancia o para actividades imprescindibles como comprar comida o medicamentos.
El Congreso debe ratificar por la tarde la prórroga del estado de alarma hasta la medianoche del 11 al 12 de abril decretada por el gobierno, que descarta detener toda la actividad económica no esencial como hizo Italia.
"Ya estamos en una situación que con el decreto del estado de alarma se ha parado mucho la actividad económica", defendió la ministra de Economía Nadia Calviño en la radio RNE.
"El objetivo no debe ser parar actividad, sino proteger a los trabajadores", insistió la ministra.
Cerca del pico de contagios
Los datos del ministerio de Sanidad mostraron un aumento del 20% de los contagios diagnosticados de 39.673 a 47.610, aunque este repunte puede explicarse debido a la compra masiva de tests para ampliar la capacidad de detección del virus.
"El incremento (porcentual) diario de fallecidos se ha estabilizado, lo que implica, probablemente, que no estamos muy lejos del pico" de contagios, dijo el director de emergencias sanitarias Fernando Simón.
Sin embargo, las cifras, advirtió Simón, pueden seguir "creciendo en los próximos días" dado que hay un retraso entre la aparición de síntomas y el diagnóstico de la enfermedad.
Más de la mitad de los fallecimientos (53%) se concentran en la región de Madrid, la más castigada por la epidemia tanto en decesos como en casos diagnosticados, que registró 290 muertes en las últimas 24 horas.
Ante la saturación del sistema sanitario y funerario, las autoridades regionales instalaron un hospital de campaña en un pabellón de congresos que podrá acoger hasta 5.500 camas y habilitaron una pista de hielo para funcionar como morgue.
También preocupa la situación en Cataluña, donde los casos diagnosticados y los fallecimientos crecen rápidamente. La región nororiental está triplicando sus camas de unidades intensivas y en Barcelona contemplan adaptar cuatro pabellones cercanos a hospitales para acoger pacientes.
Megacontrato con China
Ante la escasez de material médico denunciado por varias regiones y los colectivos sanitarios, que cuentan con 5.400 infectados, el gobierno anunció un megacontrato de 432 millones de euros (467 millones de dólares) con China para asegurarse el abastecimiento.
Según explicó el ministro de Sanidad, Salvador Illa, el lote chino incluye el suministro de 550 millones de mascarillas, 5,5 millones de tests rápidos, 950 respiradores y 11 millones de guantes que empezarán a llegr esta semana.
El gobierno también trabaja con industrias nacionales para adaptar sus cadenas de producción de automóviles o cosméticos hacia la fabricación de producto médico.
"Nos encontramos en una situación de total inseguridad y desamparo", habían denunciado en un comunicado conjunto los colegios de profesionales sanitarios.
Además de sus propias iniciativas, Madrid reclama apoyo internacional tanto a la OTAN como a la Comisión Europea, que lanzó una licitación conjunta para 25 países de equipos de protección.
"Los contratos para estos equipos deberán firmarse rápidamente y, en dos semanas, las mascarillas, los guantes, las batas y las gafas de protección estarán en vuestros hospitales", apuntó la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen.