El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que creará una institución autónoma que canalice los bienes confiscados al crimen organizado y a los políticos corruptos hacia proyectos sociales, argumentando que la burocracia dificulta el aprovechamiento de esos recursos.
"Estamos elaborando una iniciativa de ley para crear un instituto que devuelva de manera pronta y expedita todo lo que se le confisque a la delincuencia organizada y a los políticos corruptos", dijo el presidente mexicano en su habitual conferencia matutina.
Se buscará que este organismo, "autónomo, independiente", remita los recursos a gobiernos estatales o municipales "para una escuela, un hospital, un asilo de ancianos", explicó López Obrador.
En México operan poderosos cárteles narcotraficantes que también se dedican al robo de combustible de la estatal Petróleos Mexicanos, como el cártel de Sinaloa -fundado por el encarcelado Joaquín "Chapo" Guzmán- y el cártel Jalisco Nueva Generación, que amasan millonarias fortunas e impresionantes arsenales.
En muchas ocasiones, los criminales operan bajo la connivencia de autoridades corruptas.
Uno de los casos que más levantó indignación fue el del encarcelado exgobernador de Veracruz (este), Javier Duarte, acusado de haber tejido una red de testaferros para comprar numerosas propiedades de lujo con dinero público, lo que dejó a Veracruz prácticamente en bancarrota y sumido en la violencia.
"Se confiscan dólares y no se sabe a dónde va ese dinero (...) Se confiscan joyas, se confiscan residencias, hay por todos lados residencias, se confiscan ranchos, vehículos, carros nuevos de los más famosos. Es tanta la burocracia que mucho de eso se echa a perder por los trámites, y otras cosas desaparecen", aseguró López Obrador.
El presidente, que en su campaña prometió acabar con la corrupción en México, comparó el organismo que busca crear con "un Robin Hood", y propuso que lleve el nombre de "Instituto para devolver al pueblo lo mal habido, lo robado".