El cielo se oscureció completamente por cerca de dos minutos este lunes en el sur de Chile y Argentina por un nuevo eclipse total de Sol que conmovió a las miles de personas que se trasladaron hasta esa zona para ver el espectáculo natural.
La noche comenzó a caer cerca de las 13H00 (16H00 GMT). Una pequeña brisa antecedió el fenómeno que se vivió en medio del jolgorio de la gente en la playa a los pies del lago Villarrica de la localidad de Pucón, en la región de La Araucanía, unos 800 km al sur de Santiago, parte de la "zona cero" de oscuridad total de este nuevo eclipse de Sol, el segundo que se vive en Chile tras el de julio de 2019.
La incesante lluvia, el viento y las nubes cubrieron los cielos del sur de Chile y Argentina durante toda la mañana. Pero en el momento del eclipse en el sur chileno se abrió un círculo entre las nubes y se pudo ver el sol.
"Fue hermoso, único. La verdad es que nadie tenía mucha esperanza de verlo por el clima y las nubes, pero fue algo único porque se despejó justo. Fue un milagro", relató a la AFP Matías Tordecilla, de 18 años, todavía emocionado por el espectáculo.
"Es algo que no sólo se ve con los ojos, sino que se siente con el cuerpo", agregó este joven, que viajó 10 horas por tierra junto con su familia desde la ciudad de Viña del Mar (centro) hasta Pucón para ver el eclipse.
Hasta esta localidad turística llegaron miles de personas desde distintos puntos de Chile pese a los llamados a "quedarse en casa" para evitar los contagios de coronavirus.
A Cinthia Vega, habitante de Pucón, en el momento del eclipse se le "erizó toda la piel".
En Carahue, otra localidad del sur de Chile, más cercana a la costa, el eclipse se vivió en un clima tranquilo, con mucha rogativas mapuches, los indígenas y primeros habitantes de Chile y Argentina, que ven en este fenómeno el fin de una era y el inicio de un nuevo proceso de cambios.
En Santiago, la capital chilena, el fenómeno también pudo apreciarse. Se oscureció algo el cielo y bajó la temperatura.
Pese a las restricciones de movilidad para evitar la propagación de los contagios de coronavirus, unos 300.000 turistas se movilizaron hasta el sur de Chile para poder ver en vivo el momento en que la Luna, el Sol y la Tierra quedaron alineados, haciendo la noche en pleno mediodía, con la abundante vegetación y los imponentes volcanes que ofrece esta zona del sur chileno como telón de fondo.
También en Argentina
Tras su paso por Chile, el eclipse se vivió con igual emoción en el sur de Argentina.
En la provincia argentina de Neuquén, no llovió pero durante la mañana se levantó un viento muy potente que limitaba la visibilidad. Sobre la ruta 237, entre Villa El Chocón y Piedra del Águila, había un campamento donde varias familias y extranjeros aguardaban la llegada del eclipse.
Un grupo relató la odisea de llegar hasta Argentina en medio de la pandemia y conseguir una cantidad de documentos para poder llegar a Bariloche y finalmente al sitio del campamento, periplo que incluye la toma de al menos tres hisopados y la contratación de seguros médicos.
Visión Mapuche
Para los indígenas mapuches, que tienen en esta región de Chile la mayoría de sus comunidades, el eclipse tiene un significado especial y anuncia cambios a corto y largo plazo, pasar página a un nuevo ciclo.
Cuando la Luna cubre al Sol trae un mensaje de cambio, a veces negativo pero también de equilibrio. Así es que algunos mapuches atribuyeron los cambios sociales y políticos que sacudieron Chile desde octubre de 2019 al eclipse total de Sol que se vio el 2 de julio de ese año en una suerte de fiesta masiva en el desierto del norte del país.