En la madrugada de este miércoles fue detenido el expresidente ecuatoriano, Abdalá Bucaram, en el marco de una investigación por corrupción.
La Fiscalía de Ecuador señaló que se “allanó el domicilio del expresidente, ubicado en Kennedy Norte (Guayaquil), dentro de las investigaciones iniciadas por presunto peculado en compras de insumos médicos en el Hospital del Seguro Social”.
En el procedimiento, el exmandatario tenía en su poder un arma de fuego sin permiso para portarla, añadió la Fiscalía.
La ministra de Gobierno, María Paula Romo, dijo que: “En Guayaquil se han realizado 11 allanamientos y nueve detenidos. En Quito se han realizado 12 allanamientos y cinco detenciones”.
Durante las investigaciones por posible corrupción en la compra de insumos médicos para el hospital del IESS en Guayaquil, la Fiscalía informó que investiga a más miembros de la familia Bucaram, apuntó el diario El Comercio.
“Todavía tenemos pendiente ejecutar órdenes para buscar, para encontrar y luego detener al menos a una decena de personas más en los operativos de Quito y Guayaquil”, concluyó Romo.
El expresidente Abdalá Bucaram solo ejerció el liderazgo de su nación por cinco meses y 25 días. Tomó posesión el 10 de agosto de 1996 y fue destituido el 6 de febrero de 1997 por el Congreso ecuatoriano.
En su corto mandato trazó un derrotero de ajustes económicos, políticos y sociales que duraron por lo menos 10 años. Sin embargo, los seis meses en el poder le fueron suficientes para verse involucrado en escándalos administrativos por corrupción y nepotismo.
Bucaram fue acusado de desviar millones de sucres (antigua moneda ecuatoriana) en el marco del proyecto ‘Mochila escolar’, con el cual se buscaba dotar a los niños de bajos recursos con útiles escolares y alimentación.
Dicha instintiva, estimada en unos USD 40 millones -de la época-, nunca se llevó a cabo. Por lo mismo, Bucaram, junto a la entonces ministra de Educación, Sandra Correa, fueron involucrados en un proceso judicial que prescribió en el 2017.
Bucaram fue enjuiciado por peculado después de haber girado 11.000 millones de sucres de los gastos reservados de la Presidencia a cuentas de agentes de seguridad del Palacio de Carondelet (casa de Gobierno).
El llamado ‘Loco’ Bucaram ejecutó una estrategia económica planeada por Domingo Cavallo (ministro de Economía en Argentina durante el ‘Corralito’) que aumentó el costo de servicios básicos como la electricidad, el gas doméstico, el agua potable y la telefonía, originando un fuerte descontento social que desembocó en protestas a nivel nacional y paros que aceleraron su derrocamiento.
Tras 11 días de revueltas en las calles, el poder Legislativo destituyó a Bucaram por “incapacidad mental”, una figura consagrada en la Constitución que permite declarar vacante el cargo de presidente.
Bucaram dejó el Palacio de Carondelet y se autoexilió por 20 años en Panamá. Cuando regresó a su país respaldó la candidatura del actual jefe de Estado, Lenín Moreno.