El millonario empresario Daniel Noboa se posesionará este jueves ante el Congreso de Ecuador como el presidente más joven en la historia de un país sacudido por la violencia del narcotráfico y la inestabilidad política.
Autoproclamado de centroizquierda y apoyado por fuerzas de derecha, el hijo del magnate bananero Álvaro Noboa llegó al poder a sus 35 años para gobernar por un corto e inusual periodo de 18 meses.
Daniel Noboa deberá terminar el mandato inconcluso del saliente derechista Guillermo Lasso, quien disolvió en mayo el Congreso y dio paso a elecciones anticipadas para eludir un juicio político por corrupción, impulsado por diputados de oposición que formaban mayoría.
A la crisis institucional se sumó la violencia de bandas narco con poder internacional que dejan unos 3.600 asesinatos en lo que va del año, según el Observatorio Ecuatoriano del Crimen Organizado.
Con poca experiencia política y escaso apoyo en el Parlamento, el de Noboa será "estructuralmente un gobierno débil" como el de sus antecesores, incluido el de Lenín Moreno (2017-2021), dijo a la AFP el politólogo Santiago Cahuasquí, de la Universidad Internacional SEK.
"Debe asumir que es un gobierno transitorio (...) y por tanto debe ser altamente pragmático y realista respecto a sus capacidades y objetivos que va a trazarse para que no genere nuevamente una frustración para los ecuatorianos", añadió.
Nacido en Estados Unidos y egresado de prestigiosas universidades extranjeras, el nuevo mandatario es sommelier, sabe de música, intentó ser vegetariano, colecciona ajíes y le apasionan los autos y los caballos, de acuerdo con su equipo de prensa.
Su padre intentó sin éxito llegar en cinco ocasiones a la presidencia.
Fragmentación y volatilidad
Noboa derrotó en balotaje el 15 de octubre a la izquierdista Luisa González, delfín del exgobernante socialista Rafael Correa (2007-2017) con un 52% de los apoyos.
Pero el movimiento del nuevo presidente -Acción Democrática Nacional (ADN)- logró apenas 17 de los 137 escaños parlamentarios.
El viernes, Noboa se alió con el correísmo (principal fuerza con 51 curules y fuerte crítico de su padre) y el derechista Partido Social Cristiano (PSC, 18) para hacer una mayoría a la hora de designar autoridades como presidente y dos vicepresidentes del Congreso.
"Las fuerzas están fragmentadas y hay volatilidad", enfatizó Cahuasquí.
Noboa tomará posesión en Quito durante un acto al que asistirán los presidentes de Colombia, Gustavo Petro, y de Bolivia, Luis Arce, así como el vice de Brasil, Geraldo Alckmin, y los cancilleres de Panamá, Haití, Perú y Costa Rica, según indicó el ministerio de Relaciones Exteriores a la AFP.
El empresario tiene una popularidad del 60% de acuerdo a la encuestadora privada Cedatos, pese a que era casi un desconocido en la política previa a las elecciones.
Su desafío principal será enfrentar las numerosas bandas asociadas a carteles mexicanos y colombianos que imponen el terror con cadáveres desmembrados, incinerados y colgados de puentes.
Entre 2018 y 2022, la tasa de homicidios se cuadriplicó y trepó a 26 asesinatos por cada 100.000 habitantes.
También recibirá un sistema carcelario en llamas, con prisiones transformadas en campos de batalla donde los choques entre organizaciones dejan más de 460 muertos desde 2021.
Precampaña
Para los ecuatorianos, los principales problemas son inseguridad (45%), desempleo (18%), pobreza (15%) y corrupción (6%), según Cedatos.
El impacto del fenómeno climático de El Niño amenaza con golpear aún más la economía dependiente del petróleo, que registra precios inestables.
"Recibe un país en una situación económica bastante compleja, pero tampoco es la primera vez que en el Ecuador las transiciones se dan en condiciones complejas", explicó el analista Pablo Lucio-Paredes, director del Instituto de Economía de la privada Universidad San Francisco de Quito.
Para 2024, año electoral en Ecuador, habrá un déficit presupuestario de 5.000 millones de dólares (4% del PIB) y una necesidad de financiamiento de 10.000 millones (8%), según el experto.
De la población de 16,9 millones de personas, 3,1 millones tienen empleo, mientras que la pobreza -incluida la extrema- afecta al 38%, de acuerdo a cifras oficiales.
Noboa deberá definir si reduce gastos, aumenta ingresos con más impuestos o consigue financiamiento externo cuando la deuda pública representa casi un 40% del PIB (47.545 millones de dólares).
Expertos consideran que este mandato será una suerte de precampaña con miras a los comicios de febrero de 2025 en los que Noboa aspira participar.
Esas elecciones serán un termómetro de "la reputación de su gobierno" y su "capital político", expresó Cahuasquí.