La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) anunció el martes que había hallado una sustancia del tipo Novichok en el organismo del opositor ruso Alexei Navalni, quien estuvo hospitalizado en Berlín muy grave a causa de un envenenamiento, según las autoridades.
La OPAQ, con sede en La Haya, declaró que las muestras de sangre y orina de Navalni, de 44 años, contenían un "inhibidor de la colinesteresa" similar a dos sustancias químicas del tipo Novichok, prohibidas por la organización en 2019.
Esa confirmación respalda los hallazgos de laboratorios en Alemania, Francia y Suecia.
"Estos resultados constituyen un asunto muy preocupante" declaró el jefe de la OPAQ, Fernando Arias.
Alemania había pedido oficialmente la "asistencia técnica" de la organización, como tienen derecho todos los miembros de la OPAQ cuando creen que enfrentan un incidente que implica el uso de armas químicas.
Arias declaró que "ahora lo importante" es renovar la lucha para que no se utilicen armas químicas, como se comprometió la comunidad internacional hace más de 25 años, cuando se adoptó la Convención de la ONU al respecto.
Los resultados de la investigación confirman "una vez más la prueba inequívoca" de que Alexei Navalni fue víctima de un ataque con un agente químico neurotóxico del grupo Novichok", declaró en un comunicado el gobierno alemán, renovando "su llamado a Rusia para que explique lo ocurrido".
Víctima de un malestar durante un vuelo en Rusia el 20 de agosto, Alexei Navalni fue recibido primero en un hospital siberiano antes de ser trasladado a Alemania.
El Novichok es un grupo de agentes neurotóxicos particularmente peligrosos, ya utilizado en 2018 para envenenar al ex espía Serguei Skripal y su hija Yulia en Salisbury, Inglaterra.
El Kremlin negó cualquier responsabilidad y el caso provocó una crisis diplomática.
"Las próximas etapas serán discutidas en detalle en el Consejo ejecutivo de la OPAQ y entre los miembros de la UE en los días próximos. Cualquier utilización de armas químicas es un caso grave y no puede quedar sin consecuencias", agregó el gobierno alemán.
Los gobiernos occidentales presionaron a Rusia sobre el caso Navalni en una reunión esta semana de la OPAQ.