Con Brexit, Reino Unido enfrenta velada tensión con Biden | El Nuevo Siglo
El presidente electo de los Estados Unidos, Joe Biden no vacila en resaltar sus orígenes irlandeses, aparentemente para desmarcarse de Reino Unido.
Foto AFP
Domingo, 27 de Diciembre de 2020
Redacción internacional con AFP

Los artesanos del Brexit invocan desde hace tiempo un acercamiento comercial de Reino Unido con Estados Unidos (EU) para compensar el divorcio con la Unión Europea. Y para eso Donald Trump, parecía el socio perfecto.



Pero en enero, Reino Unido al mismo tiempo abandonará definitivamente el bloque de 27 países y deberá lidiar con un nuevo presidente estadounidense, Joe Biden, que prioriza la UE y no comparte el espíritu aislacionista de los "brexiters".

Biden, de origen irlandés y católico, advirtió al primer ministro británico Boris Johnson contra toda acción que ponga en peligro la paz en Irlanda del Norte, especialmente un regreso a una frontera física con Irlanda, un país miembro de la UE.

Sobre ese punto, Londres logró un acuerdo con Bruselas incluso antes del acuerdo general posbrexit alcanzado el jueves, una señal, según analistas, de cierta influencia del triunfo electoral de Biden.

"Londres comprendió que un problema en la frontera norirlandesa habría sido absolutamente tóxico para las relación británico-estadounidense", dijo Jacob Kirkegaard, del centro de análisis estadounidense German Marshall Fund.

El gobierno de Johnson subrayó los puntos en los que comparte afinidad con Biden, incluyendo la lucha contra el cambio climático. La conferencia sobre el clima en noviembre, en Glasgow, Escocia, será la ocasión para resaltar la ambición común de los dos socios trasatlánticos.

Sobre Irán también, Londres y Washington deberían estar nuevamente en la misma página, tras cuatro años de desavenencias.

"En el papel, el Partido Conservador británico es más cercano al Partido Demócrata que al Partido Republicano de Donald Trump", apunta Kirkegaard.

Los británicos también anunciaron un histórico aumento en el gasto militar, para intentar, según Kirkegaard, seguir estando al nivel de potencia como socios estratégicos de EU, especialmente en medio de las tensiones con China. Pero el próximo mandatario estadounidense podría estar más atraído a la fuerza militar de la UE.



"La Gran Bretaña del Brexit ha tratado de hacerse relevante pero para EU ya no es estrictamente necesario tenerla a su lado", señala.

Biden se ha rodeado de antiguos asesores de Barack Obama que son reacios a olvidar que en 2016 Johnson dijo, que el entonces presidente de EU tenía una "antipatía ancestral" hacia Reino Unido por sus orígenes "kenianos".

El presidente electo, que entrará el 20 de enero en la Casa Blanca, no vacila, por su lado, en resaltar sus orígenes irlandeses, aparentemente para desmarcarse de Reino Unido.

"Hay claramente entre algunas personas del círculo de Biden un sentimiento de que el Brexit fue una decisión completamente errada y que Johnson ha sido muy cercano a Trump", dice Erik Brattberg, director del programa europeo en el Carnegie Endowment for International Peace. "Piensan entonces que se necesita restarle un poco la importancia a la relación con Londres".

Pero aclara que Biden reconoce la relación especial con Reino Unido y no desatenderá a este importante aliado como su antecesor lo hizo con otros líderes europeos, especialmente la alemana Angela Merkel.

"El estilo de Trump fue más fomentar divisiones en Europa, mientras que Biden buscará que su legado sea intentar sanar esas divisiones", dice Brattberg.

Londres ha acelerado planes para sellar un acuerdo comercial con EU para compensar el divorcio europeo, pero legisladores del partido Demócrata de Biden han advertido que toda negociación estaba fuera de la mesa mientras el asunto norirlandés no estuviera resuelto.



Pero incluso con el estatus de Irlanda del Norte por ahora resuelto, cualquier acuerdo podría ser muy impopular entre la opinión pública británica, debido a normas sobre bienestar animal menos exigentes en EU para la carne, y precios probablemente más elevados para las medicinas.

Biden ha indicado que no dará prioridad a la firma de nuevos acuerdos comerciales, y sin la aprobación del Congreso, el 1 de julio perderá la posibilidad de recurrir a mecanismos para acelerar las negociaciones. /Redacción internacional con AFP