El Tribunal Electoral de Panamá anuló este viernes las candidaturas del detenido expresidente panameño Ricardo Martinelli a la alcaldía capitalina y a un escaño en la Asamblea Nacional, una decisión que podría condicionar las elecciones generales del próximo 5 de mayo en el país centroamericano.
En el fallo, firmado por los tres magistrados del tribunal, se indica que las candidaturas de Martinelli "se declaran nulas por ilegales".
El motivo de la anulación es que Martinelli, extraditado desde Estados Unidos a Panamá en junio de 2018, no residió en la circunscripción por la que se presenta el tiempo requerido para ser candidato.
Pese a estar detenido por presunto espionaje, Martinelli fue postulado por su partido, Cambio Democrático (derecha), a la alcaldía de Ciudad de Panamá y a un escaño de diputado en la Asamblea Nacional (Congreso) por su circuito electoral.
Ahora serán sus suplentes, el diputado Sergio Gálvez, y la exgobernadora de Panamá, Mayín Correa, los aspirantes a la alcaldía y a la Asamblea, respectivamente.
"Imperó la ley (que) obliga a los candidatos a interactuar al menos un año antes de la elección o la proclamación, dependiendo del cargo, con sus electores", dijo a la AFP Jorge Hernán Rubio, uno de los abogados que impugnó las candidaturas del exgobernante.
"El señor Martinelli, es un hecho público y notorio, que no residía en Panamá y no cumplía esa precondición", añadió.
El expresidente de 67 años fue extraditado en junio de 2018 tras ser detenido un año antes en Miami, donde residía desde el 2015 para evadir a la justicia panameña.
"El fallo será cuestionado por haberse demorado en definir la situación jurídica del expresidente, esto traerá una peligrosa percepción en contra de la integridad del fallo", señaló a la AFP el letrado y expresidente del Colegio Nacional de Abogados, Alfonso Fraguela.
El también abogado y analista político Ernesto Cedeño opinó que el fallo se ajusta a derecho, pero anticipó que la defensa de Martinelli llevará el caso "donde lo tiene que llevar, que es al pleno de la Corte".
El exmandatario, detenido en la cárcel El Renacer, a orillas del Canal de Panamá, enfrenta un juicio por espiar presuntamente a unos 150 opositores durante su gobierno (2009-2014). Por ese caso, la fiscalía ha pedido 21 años de cárcel en su contra.
También ha sido investigado por múltiples escándalos de corrupción durante su administración, de la que una decena de ministros fueron arrestados temporalmente.