El huracán Raymond se fortaleció este domingo hasta alcanzar la categoría 2, de las cinco que contempla la escala Saffir-Simpson, mientras se acerca a las costas del Pacífico mexicano, informaron fuentes oficiales que prevén una mayor intensificación del fenómeno en esta zona ya afectada por tormentas anteriores.

A las 03H30 GMT, Raymond era un "huracán categoría 2 en la escala Saffir-Simpson (ubicado) al sur de las costas de Guerrero (sur) y Michoacán (oeste)", indica el último reporte del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), que prevé que el fenómeno "continúe acercándose gradualmente a las costas e incrementando su intensidad".

Este ciclón, el octavo del Pacífico nororiental en alcanzar la fuerza de huracán durante la temporada 2013, avanzaba hacia tierra a 9 km/h con vientos sostenidos de 160 km/h y rachas de hasta 195 km/h y ya causaba lluvias, incremento de oleaje y viento en el oeste y sur de México, añadió el SMN.

Por su parte, el director general de la Comisión Nacional del Agua, David Korenfeld, pronosticó "lluvias torrenciales (de 150 mm o más)" en esa región durante las próximas 72 horas, y subrayó "la saturación del suelo en una zona que ha recibido fenómenos hidrometeorológicos con tanta reiteración, como fue Ingrid y Manuel".

Estos dos fenómenos, que llegaron a alcanzar fuerza de huracán categoría 1, embistieron a México a mediados de septiembre por costas opuestas, dejando a su paso un saldo oficial de 157 muertos y 1,7 millones de damnificados.

Raymond -que había alcanzado la fuerza de tormenta tropical la madrugada de este domingo- se ubicaba a 250 km al oeste-suroeste del turístico puerto de Acapulco, en Guerrero, y a 225 km al sur de Lázaro Cárdenas, Michoacán.

Los gobiernos de esos dos estados decretaron un alerta que incluye el cierre de puertos, evacuaciones preventivas, vigilancia de presas y carreteras, e incluso suspensión de clases en algunas comunidades.

Guerrero fue el estado más afectado por Manuel, con 101 muertos. En la zona montañosa, un inmenso alud de tierra y piedras incomunicó y sepultó parcialmente una comunidad, dejando decenas de desaparecidos; mientras que en el puerto de Acapulco miles de turistas quedaron varados ante el cierre del aeropuerto y carreteras.

Impredecible Raymond

Raymond, que también provocará precipitaciones en Jalisco y Colima (oeste), estará interactuando con un frente frío que "arrojará grandes cantidades de agua" en el norte y este del país, explicó Korenfeld.

Según el experto, si el frente frío del norte baja lo suficientemente rápido, podría desviar al huracán y cambiar su trayectoria de regreso al océano. "Por eso Raymond tiene posibilidades de entrar a territorio nacional o de abrirse".

Así, en Michoacán se habilitaron 34 albergues y se suspendieron las clases en los municipios de Coahuayana, Aquila, Lázaro Cárdenas y Arteaga, dijo a la AFP el secretario de Gobierno local, Jaime Mares Camarena.

Por su parte, Guerrero vigila estrechamente cuatro presas cuya capacidad estaba al 100% la mañana de este domingo y cerró la navegación a embarcaciones, pues se espera que el oleaje alcance hasta cuatro metros de altura.

Además, Acapulco y ocho municipios de la Costa Grande suspendieron las clases de cerca de 35.000 alumnos de todos los niveles, mientras habitantes de Acapulco -donde ya se reportan inundaciones de medio metro de altura- se disponían a proteger sus ventanas con tablones de madera ante la intensidad de los vientos, informaron autoridades locales de Protección Civil.

Tras habilitar 700 albergues, unas 150 comunidades en riesgo fueron evacuadas mientras se reforzó la vigilancia en carreteras.

Sólo en Guerrero, unas 5.000 viviendas deberán ser reubicadas y más de 5.000 personas continúan en albergues tras las inusuales tormentas de septiembre.

En esa ocasión, los habitantes de Acapulco debieron ser rescatados en helicóptero de los techos de sus casas ante las crecientes inundaciones, que obstruyeron el servicio de agua potable de todo el puerto.

El SMN aseguró que las lluvias llegarán hasta el centro de México, donde recientemente surgió un brote de cólera cuyo impacto asciende hasta el momento a 171 casos y una muerte./AFP