China, Rusia, Cuba y Arabia Saudita obtuvieron este martes asientos en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, a pesar de las feroces críticas de activistas de derechos humanos por los antecedentes en la materia de esos países.
La asamblea general de las Naciones Unidas aprobó la renovación de 14 de los 47 miembros del consejo, que tiene sede en Ginebra y cuya importancia diplomática sigue aumentando.
Francia y Gran Bretaña también retornaron al organismo. Además este martes fueron elegidos Sudáfrica, Argelia, Marruecos, Namibia, Maldivas, Vietnam, México y Macedonia.
Los miembros del consejo son elegidos para un mandato de tres años. No pueden ser inmediatamente reelectos tras haberlo integrado durante dos mandatos consecutivos, es decir seis años.
El Consejo, que empezará a reunirse el 1 de enero, será uno de los más divididos desde su creación en marzo de 2006. Su finalidad, precisa el sitio de internet de la ONU, es "abordar situaciones de violación de los derechos humanos y emitir recomendaciones al respecto".
"Con el retorno de China, Rusia, Arabia Saudita y Cuba (al consejo), los defensores de los derechos humanos tendrán mucho más trabajo en el Consejo el año próximo", destacó Peggy Hicks, de Human Rights Watch./AFP