La inflación británica alcanzó en abril su nivel más alto en 3,5 años, 2,7%, según datos oficiales difundidos este martes, debido al aumento del precio de los billetes de avión y al encarecimiento de las importaciones por la devaluación de la libra.
El Índice de Precios al Consumo pasó de 2,3% en marzo a 2,7% en abril, su máximo desde setiembre de 2013.
"Las tarifas aéreas fueron las que más contribuyeron" al aumento, dijo en un comunicado la Oficina Nacional de Estadísticas.
Desde que los británicos votaron a favor de la salida de la Unión Europea, el 23 de junio de 2016, la libra ha perdido alrededor de un 15% de su valor respecto al dólar y el euro.