Decenas de obras maestras del arte cubano pertenecientes a un misterioso coleccionista, incluido un Wifredo Lam que podría alcanzar los 3,5 millones de dólares, serán rematadas en noviembre por Christie's en momentos de acercamiento entre Cuba y Estados Unidos.
La célebre casa de subastas anunció que un "inédito remate de arte cubano moderno y contemporáneo perteneciente a un solo coleccionista" tendrá lugar el 22 y 23 de noviembre, en el marco de las subastas de arte de América Latina.
La venta llega en momentos en que ambos países están más cerca que nunca en más de cinco décadas, tras el restablecimiento de relaciones diplomáticas en 2015 y la reapertura de embajadas en La Habana y Washington DC.
Y por primera vez en 25 años, Estados Unidos no votó el martes contra una resolución de la ONU que reclama el fin del embargo estadounidense a la isla comunista, sino que se abstuvo, en señal de los aires de cambio que están soplando.
"El mercado del arte está ansioso por ver lo que sucede en esta subasta", dijo a la AFP Jennifer Cuminale, una portavoz de Christie's, en referencia al 'timing' político.
Christie's no desea revelar el nombre del coleccionista que ha decidido desprenderse de las obras, pero Cuminale informó que "es un cubano-estadounidense del sur de Florida que ha estado coleccionando arte cubano durante más de 30 años".
El vendedor amasó cuidadosamente a lo largo de los años casi 40 pinturas que van de la vanguardia histórica -con obras de Víctor Manuel y Amelia Peláez- a los maestros modernos de la escuela de La Habana, como Cundo Bermúdez y Mariano Rodríguez.
También fue haciéndose de obras de artistas cubanos que experimentaron con la abstracción y el surrealismo, como Lam, y un puñado de pintores contemporáneos de las décadas de 1980 y 1990.
La joya de la subasta es "Sur les traces" de Wifredo Lam, con un precio de venta estimado entre 2,5 y 3,5 millones de dólares. Lam, nacido en Cuba de un inmigrante chino y una cubana cuya madre fue una esclava congoleña en la isla, lo pintó pocos años después de su regreso a Cuba desde Francia, antes del fin de la Segunda Guerra Mundial. La obra muestra el impacto del surrealismo junto a la influencia de la cultura afrocubana.
También hay bastante expectativa en torno a la colorida "Pelea de gallos", de Mariano Rodríguez (1942), que podría alcanzar 1,2 millones de dólares.
La subasta de arte latinoamericano de noviembre buscará nuevos propietarios para obras de otros grandes artistas como los mexicanos Rufino Tamayo y Diego Rivera, el colombiano Fernando Botero y el uruguayo-catalán Joaquín Torres García.