Incertidumbre tras rescate de secuestrados en Argelia | El Nuevo Siglo
Viernes, 18 de Enero de 2013

Numerosos extranjeros seguían desaparecidos el viernes tras el asalto lanzado por el ejército argelino para liberar a los rehenes de un comando islamista en una planta de gas del Sáhara, que habría dejado numerosos muertos.

El portal mauritano ANI, usado frecuentemente como canal por grupos islamistas, aseguró que siete extranjeros --tres belgas, dos estadounidenses, un japonés y un británico-- seguían en manos del comando, vinculado a la red Al Qaida.

Una fuente de seguridad argelina indicó que los extranjeros aún en manos del comando eran diez.

Según esa fuente, citada por la agencia oficial argelina APS, "además de 18 terroristas abatidos, 12 empleados argelinos y extranjeros murieron" en la operación lanzada el jueves por las fuerzas especiales en el campo gasífero de Tiguentourine, cerca de In Amenas, a 1.300 km al sudeste de Argel.

Un informe previo de APS señalaba que el operativo permitió liberar a 573 rehenes argelinos y unos 100 extranjeros y daba parte de 30 extranjeros desaparecidos.

Trabajaban en ese lugar centenares de argelinos así como personal estadounidense, británico, japonés, noruego, filipino y un irlandés.

Los islamistas hicieron saltar una parte de la planta para rechazar el ataque y condujeron a sus cautivos en otro sector, según ANI.

Unas horas antes el portal había indicado que el grupo, denominado "Los que firman con la sangre", proponía canjear a sus rehenes por dos detenidos en Estados Unidos bajo cargos de terrorismo y exigía a Francia negociar el fin de la operación militar que lanzó este mes contra los islamistas que a mediados de 2012 conquistaron el norte de Malí.

Algunos extranjeros que consiguieron huir contaron que los islamistas habían puesto collares de explosivos a los rehenes.

Varias capitales occidentales se mostraron críticas ante el operativo de rescate, por considerar que las autoridades argelinas procedieron con cierto apresuramiento, riesgoso para los rehenes.

Un alto funcionario estadounidense sostuvo que Washington "instó enérgicamente" a las autoridades argelinas a considerar la seguridad de los rehenes como su primera prioridad.

El ministro de Relaciones Exteriores japonés convocó al embajador argelino para pedirle una explicación sobre los hechos.

La planta de Tiguentourine, cercana a la frontera libia, es operada por la petrolera británica BP, la noruega Statoil y la argelina Sonatrech.

El secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, instó a una lucha sin cuartel contra los "terroristas" de las regiones del Sahel y del Sáhara.

"Los terroristas deben estar avisados de que no hallarán santuario ni refugio. Ni en Argelia, ni en el norte de África ni en ningún otro lugar", declaró Panetta en un discurso en el King's College, una prestigiosa universidad londinense.

El exjefe de la CIA precisó que el gobierno de Barack Obama trabajaba "día y noche" para asegurar el "retorno seguro" de los estadounidenses retenidos junto con decenas de británicos, japoneses, franceses, noruegos y argelinos.

Las autoridades argelinas habían señalado de entrada que rechazaba cualquier negociación con "terroristas".

AFP