El Vicepresidente de la República, Germán Vargas Lleras, dio pasó hoy a los primeros vehículos que estrenaron la nueva Glorieta de Portachuelo, complejo vial que permite a carros, camiones y buses que vienen desde el norte del país por el departamento de Boyacá, continuar su recorrido hacia Bogotá o Chía, sin necesidad de entrar por las vías del caso urbano de Zipaquirá.
“Esta obra, construida con un inversión de 9.252 millones de pesos, consiste en una glorieta con cinco ramales y sus respectivos giros, los cuales permiten la efectiva conexión vial de las variantes Bogotá-Zipaquirá, Bogotá-Variante Comuneros y las interconexiones viales a Briceño, Ubaté y Zipaquirá”, explicó el Vicepresidente Vargas Lleras, durante el acto de inauguración, en el cual estuvo acompañado por el Director de la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, Luis Fernando Andrade, el Gobernador de Cundinamarca Álvaro Cruz y alcaldes de los municipios beneficiados con la obra.
El Vicepresidente explicó que esta vía que tiene una longitud de 1.73 km, es fundamental para la conectividad de Cundinamarca con Bogotá y el resto del país puesto que facilita la descongestión vial porque “los vehículos que vienen desde Chiquinquirá hacia Bogotá ya no tienen que pasar por el casco urbano de Zipaquirá”.
Por su parte, el Director de la Agencia Nacional de infraestructura, ANI, Luis Fernando Andrade, resaltó que con la construcción de esta Glorieta se generaron más de 459 Empleos directos y más de 1.500 Empleos indirectos, que dinamizaron la economía de los pueblos vecinos.
“Nos sentimos muy satisfechos por entregar esta obra de enorme importancia para los habitantes de Bogotá y los municipios de su área de influencia, dado que mejora la velocidad de circulación, disminuye la accidentalidad, y representa ahorros en tiempos y operación vehicular considerables”, destacó Andrade.
El Vicepresidente también destacó que gracias a la firma de dos adiciones de contrato con la ANI, desde hoy la firma Desarrollo Vial Del Norte De Bogotá-Devinorte, empezará a desarrollar los estudios y diseños para la construcción de las variantes Sopó (Briceño-Pueblo Viejo-Las Manas) y Cajicá (El Molino-Canelón).
“Estas variantes permitirán incrementar la movilización de los productos agropecuarios a los mercados nacionales e internacionales, mitigar el impacto que produce el paso urbano de los vehículos, ahorro en tiempos de desplazamiento y costos de operación en distintos trayectos”, aseguró Vargas Lleras al informar que los diseños de las variantes se realizarán con una inversión de $1.642 millones.
“Con estas obras estamos construyendo una Colombia de regiones conectadas y productivas, porque con estas nuevas vías ganan Bogotá, Cundinamarca y el país”, puntualizó el Vicepresidente de la República.
Por último, el Vicepresidente reiteró la importancia que el Distrito apruebe obras que complementen las que están siendo ejecutadas en los municipios aledaños a la Capital de la República, para evitar que justo a la entrada o a la salida de Bogotá se generen represamientos vehiculares.
“Seguiremos insistiendo ante el Distrito para que estudie las propuestas de iniciativa privada que solucionarían los trancones que se arman a la entrada y salida de Bogotá. Hay que ver lo que está padeciendo la gente que vive en la capital para entrar y salir de esta ciudad.”, señaló Vargas Lleras.