Los dos principales sindicatos españoles, CCOO y UGT, convocaron este viernes una huelga general para el 14 de noviembre para protestar contra las medidas de austeridad sin precedentes aplicadas por el gobierno conservador, en un país sumido en la recesión.
"El Comité Confederal extraordinario de UGT ha aprobado por unanimidad la convocatoria de huelga general para el 14 de noviembre, que se enmarca en la Jornada de Acción y Solidaridad Europea, acordada por la Confederación Europea de Sindicatos", dijo el sindicato en un comunicado, mientras que CCOO precisaba a la AFP haber tomado una decisión en el mismo sentido.
Una 'cumbre social' que reúne a grandes y pequeños sindicatos con unas 150 organizaciones sociales, debía votar el viernes por la tarde la aprobación formal de esta convocatoria de huelga, pero CCOO y UGT son las centrales sindicales mayoritarias.
"CCOO votará sí a la convocatoria de huelga general", aseguró a la AFP una portavoz del sindicato.
La Confederación Europea de Sindicatos (CES) llamó a realizar una jornada de acción en toda Europa el 14 de noviembre para denunciar las medidas de austeridad bajo "varias formas: huelgas, manifestaciones, concentraciones y otras acciones".
Hasta ahora también en Portugal se lanzó un llamado a la huelga general y el principal sindicato del sector privado en Grecia, el GSEE, convocó asimismo un paro.
En España, ésta será la segunda huelga general en menos de un año, tras la realizada el 29 de marzo.
Cientos de miles de personas habían desfilado entonces en ciudades de toda España para denunciar las políticas de austeridad del gobierno conservador de Mariano Rajoy que afectan a los sectores más desfavorecidos de la población en un país con casi 25% de desempleo.
Desde entonces, las manifestaciones, algunas marcadas por incidentes violentos, se multiplican en el país, asfixiado por la crisis y las medidas de austeridad destinadas a reducir el déficit público a menos del 3% del PIB en 2014 desde el 9,4% de 2011.
"Las políticas de recortes son las responsables de la asfixia económica y el desmantelamiento de nuestro modelo social", afirmaba el sindicato UGT en un resolución aprobada el viernes por la mañana.
"Todo ello está situando a las familias de nuestro país en una situación insostenible", aseguraba.
La vicepresidenta del gobierno español, Soraya Saénz de Santamaría, se mostró contraria a esta convocatoria de huelga general considerando que será perjudicial para la economía.
"Creo que en un momento de gran dificultad todos los agentes (...) estamos llamados a hacer un ejercicio de responsabilidad y así se lo pido a los sindicatos", afirmó en rueda de prensa.
AFP