En horas de la mañana el Gobierno Nacional anunciará oficialmente hoy si el ajuste del salario mínimo para el próximo año lo tomará vía decreto, como ya se preveía, ya que no hubo acuerdo durante las reuniones de la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Laborales y Salariales.

Hasta el momento, empleadores y trabajadores se mantienen en su posición de ajuste del 4,2% y del 9,5% respectivamente, mientras que el Ministerio de Trabajo analizaba las cifras con el equipo financiero del Gobierno.

Sin embargo, la muy segura expedición del decreto no termina de convencer a las partes puesto que desde la semana pasada no se anunciaron más encuentros extraoficiales para hacer un último intento de concertación.

El presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Luis Alejandro Pedraza, le aseguró a EL NUEVO SIGLO que “no hay nueva convocatoria y el Gobierno se verá abocado a emitir el decreto. Consideramos que no estará muy por encima del 4,2% que ofrecieron los empleadores, en cuanto que así mismo es el compromiso con el FMI”.

Aduce que el Gobierno se fijará en la determinación que tomó el Ministerio de Hacienda y el Banco de la República está reclamando, en el sentido en que el salario no estaría por encima de la inflación más el punto de productividad.

“Esto significa que el incremento será absolutamente precario y absolutamente desconsiderado con los trabajadores del salario mínimo, se seguirá profundizando la pérdida del poder adquisitivo de la canasta familiar”, dijo.

Al ser preguntado sobre cuál es el factor que ha llevado a tomar la decisión vía decreto y no por medio de un acuerdo, Pedraza enfatizó en que el problema está “en que la Comisión de Concertación no tiene dientes para definir, porque el Gobierno que es el que la convoca y coordina nunca asume posición o recomendaciones de orden económico, deja la responsabilidad en manos de los trabajadores y empleadores. Por ello maneja muy políticamente su discrecionalidad de emitir el decreto”.

La Comisión difícilmente puede concertar “porque si no hay acuerdo, el Gobierno impone el incremento y siempre lo hará sobre la base de lo que determine con el FMI, que en este caso es ligado a la inflación: 3,8%, más 1% de productividad y eso le daría el 4,3% o 4,5%”.

Posición compartida por el presidente de la Confederación General del Trabajo (CGT), Julio Roberto Gómez, quien consideró como una actitud “displicente con la clase trabajadora y con el país”, el hecho de que algunos empresarios estén de vacaciones sin mostrar, al parecer, intención de llegar a un último acuerdo.

“No nos parece justo porque al menos el ministro de Trabajo, Luis Eduardo Garzón, ha estado pendiente de propiciar un acuerdo y todo nos indica que hubo algo extraño en torno a la negociación de la Reforma Tributaria, porque hasta ese momento había una posición más o menos flexible y se preveía que el reajuste estaría por encima del 5%”, añadió Gómez.

Justamente, el ministro de Trabajo, Luis Eduardo Garzón afirmó que recientemente se continuó con los acercamientos con empresarios y trabajadores, "siempre tratando de acertar en la negociación y concertación del salario mínimo para el 2015".

"Nadie se puede quejar que la insistencia por la concertación ha sido nuestro objetivo. Durante estos días hemos hecho reuniones que si bien no tienen un acuerdo, lo cierto es que se siente una actitud por parte de los sindicatos y de los empresarios tratando de acertar en la negociación y la concertación", aseguró Garzón.