Esta semana es crucial para la administración de Enrique Peñalosa y el futuro político para los concejales de Bogotá, pues se decide qué pasará en los próximos cuatro años en proyectos fundamentales para el desarrollo de la capital del país.

El primer paso es escoger presidente de la Corporación para este año. Todo hace indicar que sería el concejal Roberto Hinestrosa, de Cambio Radical, partido al que le correspondería esa dignidad debido a que fue el más votado en las últimas elecciones.

Resulta que hasta hoy la coalición mayoritaria en el Concejo de Bogotá -9 de Cambio Radical, 6 del Centro Democrático, 6 liberales, 6 de la Alianza Verde, 4 de La U y 3 conservadores- determinaron que este año la mesa directiva estaría encabezada por Cambio Radical, para 2017 el Partido Liberal, en 2018 el Centro Democrático y en 2019 los conservadores.

Con base en lo anterior, EL NUEVO SIGLO conoció que entre los nueve concejales que conforman la bancada de Cambio Radical, Hinestrosa tiene seis apoyos liderados por el concejal Julio César Acosta quien se ha convertido en una especie de jefe de debate.

Hinestrosa tendría las principales opciones, no sólo por su cercanía familiar con la Universidad Externado de Colombia y reconocimiento entre las diferentes bancadas, sino que es muy cercano al alcalde Mayor de Bogotá, Enrique Peñalosa hasta el punto que el mandatario vivió en su casa en Paris cuando estudiaba.

Entonces se conformaron dos bloques en la puja interna en Cambio Radical que aspiran a la presidencia. Por un lado Hinestrosa y por otro los concejales Jorge Lozada y Yeffer Vega quien obtuvo la mayor votación en el partido y es nuevo en la corporación.

Aunque la elección del presidente del Concejo se debería realizar el próximo lunes cuando se instalan las sesiones ordinarias, la corporación tiene plazo hasta el cinco de febrero. La fecha para escoger mesa directiva depende de los acuerdos a que llegue la coalición que hasta el momento tiene 34 concejales.

En este sentido, hoy será clave en la conformación de la coalición de apoyo a la administración de Peñalosa quien ha manifestado que el número clave sería de 36 concejales, faltaría el Concejal de Libre y Opción Ciudadana, pues se reúnen hoy los compromisarios de cada partido.

En los corrillos políticos se tiene como un hecho que la oposición en los próximos cuatro años estará conformada por los cinco concejales del Polo Democrático y uno Progresista.

En este sentido, mientras los dos concejales del MIRA no ingresarían a la coalición, el concejal Juan Carlos Flórez de la Alianza Social Indígena sería el único que trabajará los cuatro años de manera independiente como ha sido su estilo de ejercer el control político en la corporación en las dos ocasiones anteriores que ha ocupado una curul.

Uno de los dilemas que tendrán que resolver los compromisarios es la presidencia del próximo año debido a que tanto el Centro Democrático como el Partido Liberal aspiran en 2017. Resulta que el cambio perjudicaría en sus aspiraciones al concejal liberal Horacio José Serpa porque tienen presupuestado renunciar en el tercer año para lanzarse al Senado.

Después que los compromisarios resuelvan las presidencias de los próximos cuatro años tienen la papa caliente de elegir al Contralor y Personero de Bogotá. El tema está enredado debido a que el Concejo aprobó a principios de diciembre un proyecto de acuerdo para reglamentar la escogencia para dirigir los organismos de control pero que fue objetado por el exalcalde Gustavo Petro.

Al tiempo que la elección de Personero no tendrá problemas porque básicamente es la misma metodología, la escogencia de Contralor de Bogotá será jurídicamente complicada, pues anteriormente la terna de candidatos la enviaban los tribunales superior de justicia y administrativo de Cundinamarca.

Al tiempo que la plenaria del Concejo deberá tomar una determinación porque el periodo del Contralor vence el 14 de febrero y del Personero el primero de marzo, el Consejo de Estado respondió una consulta del Gobierno nacional donde indicó que en las elecciones de los contralores territoriales se debe tener en cuenta la reforma constitucional que obliga a escogerlos por mérito.

Los escenarios para resolver la escogencia de Contralor tienen varias aristas. El proyecto de acuerdo aprobado por el Concejo por convocatoria pública sin criterio de meritocracia, la expresada en las objeciones de Petro mediante ternas enviadas por los tribunales y el concepto del Consejo de Estado que es por mérito. El primero de febrero se conocerá qué alternativa vota la Corporación capitalina.

Esta semana la clase política en Bogotá se juega su futuro porque se determinan la coalición mayoritaria, se escogen presidentes del Concejo para los próximos cuatro años, Contralor y Personero.