Martes, 5 de Abril de 2016
El politólogo Luis Javier Rojas, alias el Flaco, hijo de Magdalena Morera, jefe de la División Financiera del Senado y adscrito a la Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) del representante por Guaviare, Alexander García, del Partido Social de Unidad Nacional (La U), fue capturado en la Calle 94 con Carrera 21, barrio Chicó de la localidad de Usaquén, al norte de Bogotá cuando transportaba 613.950.000 pesos que, según inteligencia militar, pertenecen al Clan Úsuga.
El juez 43 de Control de Garantías de Bogotá ordenó la detención domiciliaria de Rojas por considerar que no representa un peligro para la sociedad.
Ante el juez, la Fiscalía solo sustentó el delito de cohecho, ya que le habría ofrecido dinero al funcionario público que le pidió una requisa, pero no lavado de activos y enriquecimiento ilícito, como se había indicado inicialmente, que hubieran sido determinantes en ese caso para ordenar el traslado a un centro penitenciario.
Aunque las autoridades aseguran que el dinero es de la mencionada banda criminal (Bacrim), a la hora de presentar las respectivas pruebas la Fiscalía no pudo demostrar en la audiencia el origen ilícito de la plata.
Con todo, el juez precisó que eso no libera a Rojas de la eventual responsabilidad en los otros delitos si el investigador en un futuro logra demostrar los vínculos del procesado con las Bacrim.
De acuerdo con la información suministrada por el Ejército Nacional, la acción se logró luego de arduas labores de seguimiento e inteligencia militar, apoyadas por el CTI de la Fiscalía y tropas de los batallones Guardia Presidencial y de Fuerzas Especiales Urbanas Número 3, de la Décima Tercera Brigada de la Quinta División.
El dinero, que presuntamente hacía parte del sistema de financiamiento ilegal del Clan Úsuga, mediante la comercialización ilegal de drogas, era transportado por Rojas, quien al parecer habría sido contactado por esta estructura criminal para aprovechar y así movilizar el dinero sin despertar sospechas entre Bogotá y distintos lugares.
A través de un comunicado, la Cámara aclaró que por solicitud del representante García se revisaron los archivos físicos que reposan en la División de Servicios del parque automotor de la Corporación y no se encontró ningún registro correspondiente al vehículo marca Toyota Camry, de placas OBH 651, que conducía Rojas con el material incautado.
El presidente del Senado, Luis Fernando Velasco, del Partido Liberal, explicó que el vehículo ya no hace parte de los carros del Congreso, lo que le preocupa porque quiere decir que la empresa que compró esos vehículos "no está haciendo los papeles correspondientes y eso es muy delicado porque están andando carros particulares, que ya no son del Congreso, como si lo fueran".
El representante García manifestó a través de un comunicado que está dispuesto a someterse a cualquier investigación de los organismos de control, con el ánimo de aclarar que no tiene ninguna relación con las actuaciones de Rojas.
El congresista anunció que Rojas, que estaba vinculado a su UTL desde agosto, deberá asumir “su defensa por fuera de mi grupo de trabajo”.
“Desconozco las actividades que adelantaba el señor Rojas por fuera de su horario laboral y mucho menos la procedencia del dinero, que de acuerdo a información de distintos medios de comunicación, llevaba consigo”, declaró el legislador, reiterando su “disposición de atender cualquier requerimiento de llegarse a presentar, toda vez que nada tengo que ver con los hechos investigados”.