Un aumento en las tasas de interés será posible a finales de este mes, tras dos alzas continuas en septiembre y octubre y que incrementaron los tipos en 0,75 por ciento hasta 5,25 por ciento.
Los expertos del Bancolombia consideran que habría mayores incrementos, sobre todo teniendo en cuenta las presiones de inflación que se han presentado y que tiene desbordado el índice de precios de la meta prevista.
La autoridad monetaria expresó que la principal consideración que soportó la decisión unánime fue el aumento de las expectativas de inflación y los riesgos sobre las perspectivas de precios para 2016. Ello, porque las alarmas en materia de crecimiento económico se mantuvieron estables.
Los riesgos sobre las expectativas de inflación se han acentuado y condicionarían las decisiones del Emisor. Una vez conocidos los resultados de inflación, los riesgos sobre las expectativas inflacionarias podrían pronunciarse más y los del crecimiento mantenerse estables.
Bajo el criterio de la decisión de la reunión anterior, esto conduciría a la autoridad monetaria a inclinarse por incrementar su tasa de referencia en 25 puntos.
Partiendo de una postura de política monetaria expansiva, la Junta Directiva continuaría señalando que este aumento es coherente con la convergencia de la inflación hacia la meta de 3%.
Vale la pena recordar que en marzo de 2015 señalamos que el inicio del año era el momento oportuno para elevar la tasa de referencia y asegurar el anclaje de las expectativas de inflación.
No obstante, la autoridad monetaria mantuvo su postura de estabilidad varios meses, hasta reconocer que los riesgos sobre la convergencia de la inflación al 3% se han acentuado y que el proceso de retorno de la inflación a la meta tomaría más tiempo que lo previsto.
Así, a pesar de que una buena parte de la presión inflacionaria es de naturaleza temporal, creemos que para mantener las expectativas de inflación ancladas a la meta del Banco Central, la autoridad monetaria deberá hacer un ajuste en tasas de mayor magnitud que el que podría haber realizado si hubiese reaccionado de manera más anticipada.
Esperamos que en lo que resta del presente año el rumbo de las tasas de mercado monetario esté altamente condicionado al nivel de la tasa del Banco de la República. En particular, prevemos que la tasa IBR overnight se ajuste a las decisiones de tasas del Emisor. En el caso de la DTF, estimamos que se ubique en un nivel superior a la tasa repo en el cierre del año, como reflejo de las condiciones de menor liquidez del mercado monetario que prevalecerán en los próximos meses. Por su parte, en 2016 es previsible que, a medida que se materialicen los recortes de la tasa de intervención, la tasa DTF exhiba una tendencia bajista, manteniéndose un margen positivo frente a la repo.