Habitantes de la calle se están dispersando | El Nuevo Siglo
Miércoles, 8 de Junio de 2016

Tal y como sucedió después que se inauguró en el año 2000 el parque Tercer Milenio y el supuesto fin a la ‘olla’ del tráfico de drogas, delincuencia y pandillas más grande en Colombia, El Cartucho, los habitantes de la calle se tomaron las vías públicas y los traficantes se desplazaron al Bronx, ‘Cinco Huecos’ y otros expendios de drogas. Hoy está sucediendo lo mismo.

Mientras los habitantes de la capital del país observan que en andenes, semáforos, antejardines y vías públicas son tomados por habitantes de la calle, en debate de control político en la Comisión de Gobierno del Concejo de Bogotá sobre "puntos calientes" de inseguridad e intervención en el Bronx, Gloria Stella Díaz, del MIRA, denunció que en varios puntos los ciudadanos tienen miedo porque los habitantes de la calle están dispersándose. “Los barrios se están llenando de habitantes del Bronx y la orden de las mafias es atracar a las personas y generar terror en toda la ciudad y a cambio les están dando droga".

Aunque dijo estar de acuerdo con la intervención de los llamados puntos calientes para combatir la inseguridad, la concejala Díaz cuestionó a la administración, "la ‘olla’ del Bronx todavía está hirviendo. Algunos habitantes de calle señalan que cuando solicitan atención no encuentran cupos, además que mientras las autoridades adelantaban la intervención el centro de atención a habitantes de calle "Librera" que tiene capacidad para atender 300 personas estaba cerrado y que en la actualidad no hay el pie de fuerza suficiente para combatir las otras ‘ollas’”.

Mientras que el concejal Jairo Cardozo hizo un llamado a la administración para que se haga claridad sobre el número de segmentos calientes, pues según estudio de expertos de universidades están identificados en Bogotá 1.372 segmentos calientes y el distrito solo se ha centrado en 750.

Cardozo también cuestionó a la administración por no tener un soporte social para atender a menores de estas zonas críticas, así como atención inmediata a madres y niños que en estas zonas viven.

Por su parte, el subsecretario de Seguridad, Daniel Mejía, presentó el cronograma de intervención de los 754 puntos calientes de inseguridad identificados en la capital, afirmando que el efecto globo o de desplazamiento por la intervención de puntos calientes como el Bronx se tenía previsto y se están tomando medidas para contrarrestarlos.

Explica que no da a conocer sitios exactos de intervención para no dañar las investigaciones de autoridades y que 6 meses después de intervención se podrá presentar un balance general de las acciones en contra la inseguridad y tráfico de estupefacientes en estas 754 zonas, es decir en agosto aproximadamente.

Agregó Mejía que en los puntos calientes se ubica el 24% del crimen de la ciudad, Suba con 101 sitios identificados es la localidad con más puntos calientes y La Candelaria por tamaño, la más pequeña con 20 puntos calientes y que en zonas como estas, se aumentó presencia policial de 20 minutos al día, a  90 o 100 minutos diarios creciendo así la presencia policial en estos 754 puntos identificados.

El MIRA insistirá en un proyecto de acuerdo que procura que para el control de los puntos críticos se establezcan lineamientos de estrategias integrales, en donde no solo esté la fuerza pública sino también acciones socioeconómicas, culturales, y de salud, que ayudarán a erradicar de su entorno el crimen organizado.

A su turno, el concejal Antonio Sanguino, de la Alianza Verde, denunció que existen once "ollas madres" que funcionan como El Bronx en la ciudad. “No salimos del asombro. Aunque lo supiéramos o lo sospecháramos, no dejamos de sorprendernos por las revelaciones que a diario nos dan las autoridades sobre la singular combinación de actividades criminales que se presentaban en El Bronx, en pleno corazón de Bogotá. Y muchas voces no dejan de felicitar y aplaudir la acción conjunta, bajo el liderazgo de la Alcaldía y la Presidencia de la República, de las autoridades de Policía, justicia y protección social sobre esta zona de 9.500 metros cuadrados, situada a escasos 600 metros de las principales sedes del poder público del país, y en las narices del Comando Central de la Policía Metropolitana”.