El técnico del Barcelona, Josep Guardiola, ganó en Zúrich el premio de la Federación Internacional de Fútbol al mejor entrenador del año por el que competía con el portugués

Jose Mourinho, del Real Madrid, y el escocés Alex Ferguson, del Manchester United.

“Quisiera compartir el premio con Mourinho y Ferguson y con los entrenadores que aman este deporte. También se lo quiero dedicar a los miles de personas que trabajaron en el Barcelona durante años. Es un privilegio y un honor formar parte de este grupo”, explicó el técnico.

Guardiola también tuvo un recuerdo para su adjunto Tito Vilanova, con problemas de salud en los últimos meses, y dijo “Va por ti, Tito” en su dedicatoria.

El galardón cierra un gran año para Guardiola, que ganó en 2011 cinco títulos para su club, incluyendo la Liga de Campeones y el Mundial de Clubes, y está considerado uno de los mejores entrenadores de la actualidad.

Según Guardiola, la cantera y el juego colectivo, son las claves del éxito en el elenco que dirige.

“Diría que (la cantera) es lo más importante. Los jugadores que vienen de fuera son igual de importantes pero el hecho de que haya jugadores que se conocen desde que tienen 10 y 11 años, que son amigos, facilita mucho el trabajo”, explicó.

“Tienen una implicación personal, afectiva. Todos queremos ganar, a veces puede ser y a veces no, pero que jugadores (de la cantera) puedan jugar una final de la Champions o del Mundial de clubes juntos es un éxito”, destacó Guardiola.

El técnico también destacó el juego colectivo como clave en los éxitos de los últimos años.
“Esto es un juego colectivo, no es el tenis, con figuras como Roger Federer, Rafa Nadal o Novak Djokovic. Los que estamos aquí (del Barcelona) estamos agradecidos pero tenemos que darle el valor que tiene, es un juego colectivo donde todos influyen en todos”, recordó.

Pep también habló de la Liga española, donde el Barcelona está segundo a cinco puntos del líder, el Real Madrid, tras empatar el domingo (1-1) en el derbi de la capital catalana contra el Espanyol.

“En la Liga competimos contra un rival con unos números espectaculares. Hay que pensar que algo más tenemos que hacer. Al final, si un equipo está cinco puntos por delante. Es que hasta ahora lo ha hecho mejor. De nosotros depende darle la vuelta”, dijo.