El presidente Barack Obama dijo este martes Estados Unidos podría "reconsiderar" su política hacia Siria si obtiene pruebas de que el régimen de Damasco ha usado armas químicas.
Pero Obama mostró cautela sobre los informes de inteligencia, diciendo en una conferencia de prensa en la Casa Blanca: "debo estar seguro de que conozco los hechos. Eso es lo que el pueblo estadounidense esperaría".
"Si de alguna manera se puede establecer que no sólo Estados Unidos sino también la comunidad internacional están seguros de que el régimen de Asad está usando armas químicas, entonces habrá un cambio de política", advirtió.
El gobierno de Bashar al-Assad ha sido acusado de usar armas cargadas con agentes químicos contra objetivos en áreas civiles en el marco de su guerra contra los rebeldes armados.
Washington había advertido previamente que el uso las llamadas armas de destrucción masiva representaría el cruce de una "línea roja" que no debía tolerarse y que en ese caso la comunidad internacional debía reaccionar.
"Por cambio de política entiendo la necesidad de repensar el espectro de opciones que tenemos a disposición", agregó.
En la misma conferencia de prensa, el presidente Obama defendió el trabajo realizado por la Policía Federal (FBI) antes del doble atentado de Boston (Massachusetts, noreste) el 15 de abril.
"De acuerdo con lo que he leído hasta ahora, el FBI cumplió con su deber", declaró Obama ante la prensa y saludó nuevamente la ayuda de Rusia en la investigación.
Por otra parte, el mandatario prometió renovar sus esfuerzos para cerrar la prisión militar de Guantánamo (Cuba), donde un centenar de presos sospechosos de actividades terroristas realiza una huelga de hambre.
Obama dijo que no quiere que ningún prisionero muera y llamó al Congreso a ayudarlo a encontrar una salida legal a largo plazo al problema de juzgar a combatientes enemigos.
"No es una sorpresa para mí que tengamos problemas en Guantánamo. (...). Sigo creyendo que debemos cerrar Guantánamo. Es importante que comprendamos que Guantánamo no es necesario para la seguridad de Estados Unidos. Cuesta caro, es ineficaz", declaró el mandatario.