Entre las funciones está que sea ese alto Tribunal quien controle a la Corte Constitucional.

En desacuerdo con las nuevas atribuciones que aprobó la Comisión Primera del Senado para la Sala Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura, durante el primer debate de la reforma a la Justicia, se mostró el ministro de Justicia Juan Carlos Esguerra.

Según el funcionario, estas nuevas facultades no hicieron parte del acuerdo entre el Gobierno, las Cortes y el Congreso, para impulsar el trámite de la iniciativa.
“No formó parte del acuerdo el conjunto de atribuciones adicionales, como darle más funciones al Consejo Superior de la Judicatura, permitir que éste en su Sala Disciplinaria participe en la Sala de Gobierno (de las altas Cortes), que se acepte la posibilidad del control por la Sala Disciplinaria sobre la Corte Constitucional, en la base de unos controles recíprocos. En eso el Gobierno no está de acuerdo y no está dispuesto a permitir que eso ocurra, y se va oponer de patas y manos en el Congreso (…) Tampoco estamos de acuerdo con que la Sala Disciplinaria tenga funciones jurisdiccionales relacionadas con el tema de las tutelas”, manifestó ayer Esguerra en La W Radio.
Asimismo, afirmó que, aunque no estuvo en los acuerdos que lograron, en el proyecto quedó incorporado el aumento de ocho a 12 años del período de los magistrados de las Cortes.
De otro lado, el Ministro destacó el hecho de que dentro de los puntos que fueron objeto de consenso entre el Ejecutivo, las Cortes y los ponentes del proyecto, se encuentra buena parte de las propuestas cardinales del Gobierno.
Una de ellas, explicó, es “la reforma del artículo 116 de la Carta, con el fin de que nos permita crear los instrumentos excepcionales y transitorios para atribuir funciones jurisdiccionales a notarios, centros de arbitraje, funcionarios de los despachos judiciales”, e inclusive abogados, de modo que se pueda utilizar este capital humano, de gran valía para la sociedad. Desde su perspectiva, esta medida contribuirá a disminuir ostensiblemente la congestión que hoy aqueja a la Rama Judicial para atender el clamor del ciudadano de a pie.
Otra es la supresión de la Sala Administrativa del Consejo Superior Judicatura y la creación, en su lugar, de la denominada Sala de Gobierno, en la cual serán los propios primeros interesados “los que se encarguen de la administración de los recursos con criterio gerencial, de una forma parecida a la del Banco de la República”, puntualizó el Ministro de Justicia. De esta manera, agregó, se conservará la autonomía de la Rama para el manejo de sus propios asuntos, al tiempo de darles a las Cortes una injerencia directa en la administración de un sector que conocen mejor que nadie.
En cuanto al tema polémico del fuero militar, Juan Carlos Esguerra sostuvo que por ahora está “en remojo” si el Gobierno retira o no el artículo que tiene que ver con ese tema del proyecto de reforma a la Justicia.
“Se está mirando qué conviene más, si discutirlo en el margen de la reforma al Justicia (…) esto debe estar por resolverse en los días por venir”, indicó. Además, señaló que este tema lo está dialogando con el ministro del Interior Germán Vargas y está siendo coordinado por el Presidente de la República.
Frente a la sugerencia de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz (MAPP) en Colombia, de reformar el marco jurídico de la Ley de Justicia y Paz, el funcionario respondió que hay que analizarlo.
Esguerra Portocarrero explicó que, entre algunas de las propuestas del juez español Baltasar Garzón, quien hace parte de la Misión, está que los jefes de las autodefensas extraditados regresen a Colombia para que respondan como cabecillas y contribuyan a la verdad, justicia y reparación.