El nuevo director de la Policía, mayor general Jorge Hernando Nieto Rojas, llega al cargo en medio de una de las crisis de imagen y credibilidad más graves de la institución en los últimos años.
Como se sabe, esta semana el general Rodolfo Palomino se vio obligado a pedir su retiro del servicio activo luego de que la Procuraduría General le abriera investigación por el caso de las presuntas interceptaciones ilegales a periodistas, las denuncias sobre la existencia de una red de prostitución homosexual al interior de la Policía y hasta unas pesquisas sobre su patrimonio económico. A ello se suma la publicación de un video en el que se ve a un entonces senador y un oficial de la Policía hablando sobre un encuentro sexual, que sería una de las pruebas que tendría el Ministerio Público para probar que sí existía una red de proxenetismo en la institución armada. A ello se suma, la renuncia en las últimas semanas de la subdirectora de la Policía y del jefe de seguridad presidencial, en tanto que otros altos oficiales fueron llamados a calificar servicios. También se produjo esta semana la suspensión de otro general cuya aprobación de ascenso por parte del Congreso había sido aplazada por el propio Ministerio de Defensa en diciembre pasado. Y todo ello en medio de denuncias sobre un pulso de poderes al interior de la Policía, así como de nuevos casos de corrupción, tráfico de influencias y otros capítulos delincuenciales aislados en que se vieron involucrados uniformados.
Enfrentar, pues, ese difícil escenario es la tarea que le toca al general Nieto Rojas, que en sus primeras declaraciones fue claro en advertir que lo importante no sólo era que se profundizaran las investigaciones sobre las denuncias, sino que la Policía se uniera en torno a su misión y propósito funcional primario, como es la protección de la vida, honra y bienes de todos los colombianos.
No será, como se dijo, una labor fácil ni inmediata. Por igual es claro que hay ya en marcha una reforma estructural a la institución y que una comisión de alto nivel dará en las próximas semanas sus recomendaciones sobre los ajustes que se requieren en ese organismo de la Fuerza Pública. A ello se suma que ya el Gobierno viene trabajando con mayor decisión en su promesa programática de crear un Ministerio de la Seguridad Ciudadana al cual estaría adscrita la Policía.
El nuevo Director de la Policía Nacional nació en el municipio de Pacho, Cundinamarca. En 1980 ingresó a la Escuela de Cadetes de Policía General Francisco de Paula Santander.
Es abogado de la Universidad La Gran Colombia, Administrador de Empresas de la Universidad Cooperativa de Colombia y Administrador Policial.
Igualmente realizó estudios de Gerencia de la Investigación Judicial, en Formación de Conciliadores en Derecho y en Gerencia de la Consultoría de la Seguridad Ciudadana.
Así mismo, se especializó en administración del desarrollo en Washington y en Ginebra, así como en Dirección y Gestión de Recursos Humanos para Jefes de Policía en España.
Se graduó como subteniente en 1981 y durante su carrera en la Policía Nacional fue comandante de sección de vigilancia en la Policía Metropolitana de Bogotá, jefe de Policía Judicial en Cali y responsable de las compañías de estudiantes en la Escuela de Cadetes de Policía General Francisco de Paula Santander.
También se desempeñó como jefe de la Central de Inteligencia de la Subdirección de Policía Judicial, subcomandante y comandante en el departamento del Meta, Director de Recursos Humanos y Director de la Oficina de Talento Humano.
En su etapa como oficial general, trabajó como Comandante de la Región de Policía No. 4, Director de Investigación Criminal e Interpol, Director de Seguridad Ciudadana y hasta hoy como Subdirector General.
El general Nieto Rojas ha recibido más de 138 felicitaciones, 66 condecoraciones y medallas, entre las que se destacan la Cruz al Mérito Policial otorgada por séptima vez, la Estrella de la Policía en grado Gran Oficial, Orden Mérito a la Democracia y Orden del Congreso.