Se recrudeció ayer la polémica entre el Gobierno y la oposición encabezada por el senador Álvaro Uribe por cuáles serían las causas del accidente el martes pasado del helicóptero que se estrelló en la región de Urabá, dejando 16 policías muertos y dos heridos.
El aparato volaba con dos helicópteros más en desarrollo de la operación Agamenón que adelanta la Policía contra la banda narcotraficante del “Clan Úsuga”, cuando de un momento a otro se vino a tierra.
A pesar de que por el momento no se sabe a ciencia cierta qué pasó porque no han culminado las investigaciones, el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, dijo que la hipótesis con más fuerza es que “el helicóptero se habría estrellado contra un cerro y el impacto lo destrozó, y todo esto pudo haber sido por el mal tiempo y eso hizo que el nivel del vuelo fuera más bajo”.
Sin embargo, desde el mismo día del siniestro Uribe sugirió que el helicóptero habría sido derribado por un grupo guerrillero y pidió la verdad al Gobierno. “Alguien cercano a la Fuerza Aérea argumenta la hipótesis de que el avión caza que cayó en el Cesar también fue impactado. Por favor la verdad!”, escribió en su cuenta de Twitter.
En tanto que en las últimas horas, Uribe, pretendiendo corroborar que el aparato fue impactado, señaló en Twitter que uno de los sobrevivientes presenta herida de bala. “Anoche hubo reporte médico de impacto de bala a una de las víctimas. Hoy médicos de la Policía dicen que no”.
Incluso, Uribe se remitió al audio en el que presuntamente uno de los tripulantes de los dos helicópteros que acompañaban la aeronave que se estrelló indica que “parece ser que los impactaron por debajo pero no balas sino un tatuco o algo”.
Al respecto, el expresidente asegura que “el audio sobre el tatuco contra el helicóptero es de alguien del helicóptero que escoltaba”.
Esta es la segunda aeronave de la Fuerza Pública que se estrella en los últimos cinco días, pues la semana pasada fue un avión Casa de la FAC en Cesar, aparentemente por fallas mecánicas, cobrando la vida de 11 uniformados.
Por su parte, ayer voceros de la Clínica Panamericana en Urabá, donde fueron llevados en primera instancia los dos heridos, así como del Hospital Simón Bolívar, a donde fue trasladado después uno de ellos, aseguraron que los policías presentan quemaduras pero no heridas de bala.
En este sentido el ministro Villegas dijo que “esta es una información médica oficial, luego de realizar varios exámenes a los dos heridos se estableció que no tenían impactos de fuego ni novedades distintas a quemaduras de segundo y tercer grado”.
En tanto que sobre la grabación de audio a la que Uribe alude, Villegas dijo que “el conocimiento que tengo es que al parecer se trata de un audio que no es oficial, de una persona que no tenía responsabilidad en ese momento”.