La Estrategia de Sostenibilidad Ambiental del Plan Nacional de Desarrollo 2010-2014 no paso el examen de la Contraloría General de la República, que encontró resultados deficientes en metas prioritarias como la delimitación de páramos y humedales, la formulación de los Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográficas  (POMCA) y las acciones emprendidas frente al cambio climático.

 

Así lo señala el Informe sobre el Estado de los Recursos Naturales y del Ambiente 2014, elaborado por la Contraloría General de la República.

 

En 2014 persistió la ineficiencia en la ejecución de los recursos del Presupuesto General de la Nación apropiados por las Corporaciones Autónomas Regionales con destino a gastos de inversión, indica también el informe.

 

La Contraloría General de la República anunció un Seguimiento Especial a las Corporaciones Autónomas Regionales del país, al encontrar que estas entidades, que son la autoridad ambiental en las regiones, mostraron también deficiente gestión presupuestal en las vigencias 2012 y 2013.

 

En esta oportunidad, el informe anual sobre el estado de los recursos naturales y del ambiente analizó y evaluó la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental - Gestión Ambiental para el Desarrollo Sostenible, contenida en el Plan Nacional de Desarrollo 2010-2014 “Prosperidad para todos”y particularmente algunos de los que fueron sus ejes prioritarios, como la biodiversidad, el cambio climático y la gestión ambiental sectorial.

 

Se analizó  también la gestión de las entidades del Sistema Nacional Ambiental- SINA entre 2011 y 2014.

 

Deficientes resultados en varios frentes

 

En la estrategia biodiversidad y servicios ecosistémicos se obtuvieron resultados deficientes en el cuatrienio en la meta “delimitación de páramos y humedales a escala 1:25.000”; teniendo en cuenta que los resultados del cuatrienio muestran que sólo se alcanzó el 3.4% de las hectáreas previstas, que corresponde a la delimitación del Páramo de Santurbán.

 

Igualmente, frente a la meta de delimitación de humedales no se obtuvieron los resultados esperados, toda vez que a diciembre de 2014 no existen humedales delimitados en escala 1:25.000, adoptados mediante acto administrativo, tal como lo estableció el artículo 202 de la Ley 1450 de 2011.

 

En la estrategia de gestión integral del recurso hídrico, los resultados de las metas del cuatrienio también son deficientes, especialmente en lo relacionado con ordenación de cuencas e incorporación de gestión del riesgo.

 

La situación descrita se reflejó en los precarios resultados que se tuvieron en materia de Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas (POMCA) formulados conforme al Decreto 1640 de 2012.

 

Tan sólo se alcanzó el 8% de los resultados esperados de la meta del PND, la cual era de 28 POMCAS formulados. Igual situación se presentó con la meta de formulación de cinco planes estratégicos de las Macrocuencas, Magdalena–Cauca, Caribe, Pacífico, Orinoco y Amazonas, que alcanzó apenas el 40% de cumplimiento[1].

 

Acciones frente al cambio climático

 

En cuanto a la estrategia de cambio climático, no se cuenta con ningún plan de adaptación sectorial finalizado de los cuatro previstos en la meta del cuatrienio. Sin embargo, se presentaron avances en la formulación de planes de adaptación de los sectores Agropecuario, Infraestructura, Energía y Salud, que corresponden sólo a las fases 1 y 2 sobre generación de información y acompañamiento del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y el IDEAM a los respectivos sectores.

 

Tampoco se ha creado mediante Decreto el Sistema Nacional de Cambio Climático (SISCLIMA), el cual permitiría adelantar una adecuada coordinación y articulación entre los diferentes ministerios y entidades en el país, tal y como se planteó  en el CONPES 3700 de 2011 “Estrategia institucional para la articulación de políticas y acciones en materia de cambio climático en Colombia.” [2]

 

Ineficiencia presupuestal de las CAR

 

En la vigencia fiscal 2014 la CGR observó ineficiencia en la ejecución de los recursos del Presupuesto General de la Nación apropiados por las Corporaciones Autónomas Regionales con destino a gastos de inversión.

 

Se encontró que 17 de las 20 Corporaciones beneficiadas con esos recursos no obligaron los compromisos y, por el contrario, constituyeron reservas presupuestales en cuantías significativas, superando los máximos permitidos por el artículo 2° del Decreto 1957 de 2007. Así es el caso de:

 

La CVC (100%). CORPOURABA (28%), CODECHOCÓ (37%), CORPONARIÑO (68%), CORPOGUAJIRA (83%), CORPOCESAR (54%), CORPOMAG (100%), CDA (22%), CORALINA (31%), CORMACARENA (37%), CORPOMOJANA (74%), CARSUCRE (69%), CRA (100%), CAS (995), CORPOBAYACÁ (86%), CORPOCHIVOR (34%) y CORPOGUAVIO (57%).

 

Al igual que en las tres vigencias anteriores, buena parte del presupuesto de inversión apropiado a  las CAR se concentró en las cuatro Corporaciones que no recibieron recursos del Presupuesto General de la Nación: la CAR, la CVC, CORNARE y la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga (CDMB), siendo los recursos propios su fuente de financiación.

 

Para la vigencia 2014 el porcentaje de apropiación llegó al 56% de la totalidad de la apropiación de las Corporaciones Autónomas Regionales CAR. Y pese a contar con estos cuantiosos recursos, dichas Corporaciones presentaron los más bajos desempeños en su ejecución:

 

La CAR- Cundinamarca tan sólo ejecutó el 11% de sus recursos y constituyó reservas presupuestales por el 89%; la CVC ejecutó el 74% y constituyó reservas por el 26%; CORNARE ejecutó el 35% y constituyó reservas por el 65% y la CDMB ejecutó recursos por el 60% y constituyó reservas por el 40%.

 

Disminuye gasto ambiental por sectores

 

Para los sectores (social, infraestructura, agropecuario, defensa y seguridad, gestión pública y minas) el gasto de inversión ambiental, evidenció una tendencia a la disminución, situación  que afectó el cumplimiento de las políticas y planes ambientales.

 

 Así mismo, el gasto ambiental de dichos sectores no correspondió a una asignación presupuestal específica sino que el componente ambiental era parte integrante de planes programas y proyectos misionales de otros componentes como el productivo, tecnológico o social, lo que dificultó la estimación de las inversiones en este campo, así como el control y seguimiento de su destinación.

 

Adicionalmente se reportó ejecución de recursos en actividades que para la CGR no constituían gasto ambiental, tal como ocurrió en el SENA.

 

El Informe de la CGR sobre el estado de los Recursos Naturales y del Ambiente 2014 concluye indicando que la implementación de los ejes estratégicos del Plan Nacional de Desarrollo PND 2010-2014 para el sector medio ambiente presentó deficientes resultados en materia de cumplimiento de distintas metas prioritarias, correspondientes a los ejes estratégicos señalados; situación que puede obedecer a la baja ejecución de los recursos del Presupuesto General de la Nación y recursos propios de las Entidades del Sistema Nacional Ambiental –SINA.