El gobierno de Sebastián Piñera resolvió este lunes cerrar el diario estatal La Nación tras 95 años de existencia, una decisión que, según el Colegio de Periodistas, acrecentará la concentración de medios en Chile, donde dos empresas controlan el 90% del mercado.
En una junta extraordinaria de accionistas, los representantes del gobierno -que posee el 70% de la propiedad del diario- votaron a favor del cierre y disolución de la sociedad, frente a la oposición de los accionistas minoritarios y los sindicatos de trabajadores.
"Durante 20 años tras el retorno a la democracia, hemos visto un diario La Nación que ha estado siempre bajo la subordinación de los gobiernos de turno. Creemos que esto no es conveniente y que los gobiernos no necesitan de medios de comunicación propios", dijo en rueda de prensa el portavoz del ejecutivo, Andrés Chadwick.
El gobierno pretende además que el Diario Oficial, hasta ahora a cargo de la sociedad de La Nación, retorne al Ministerio del Interior.
"El gobierno impuso su criterio, argumentando que no quiere tener más sociedades con privados, y que el diario es deficitario, cuando en realidad cuenta con unos 4 millones de dólares de utilidades anuales, entre ingresos por publicidad y procedentes del Dario Oficial", señaló a la AFP Víctor Pérez, presidente del sindicato de trabajadores del diario.
"Esta es una decisión política. Es político todo lo que tiene que ver con el empleo de los fondos del Estado y La Nación es un diario deficitario. Yo pensé que los medios de comunicación iban a estar muy contentos porque se les acaba una competencia desleal", afirmó por su parte el senador de la oficicialista Renovación Nacional, Carlos Larraín.
Tras la llegada al gobierno de Piñera, la edición impresa de La Nación fue eliminada aduciendo "razones económicas", y desde entonces se difunde solamente por internet. Su cierre implicaría el despido de unos 110 trabajadores, según Pérez.
Sin embargo, Chadwick expresó este lunes que la "voluntad" del gobierno es que se mantenga la versión digital del diario, pero "como medio independiente".
La prensa escrita chilena presenta una alta concentración, en el que solamente dos empresas de tendencia conservadora -El Mercurio y Copesa- controlan el 90% del mercado.
"Lo que tenemos ahora es que estamos en un país en el que no hay diarios de oposición", dijo el presidente del Colegio de Periodistas, Marcelo Castillo.
"El cierre de La Nación es un atentado a la libertad de expresión, que concentra aún más el duopolio del mercado de medios escritos", agregó por su parte Pérez.
De momento, el grupo de accionistas minoritarios Colliguay decidió impugnar el resultado de la junta de accionistas.
La Nación fue fundada en 1917 por el periodista Eliodoro Yáñez. Una década después fue expropiado por el Estado. En los primeros años de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) pasó a llamarse La Patria y luego El Cronista.
AFP