La nueva magistrada de la Corte Constitucional, Gloria Ortiz, ha sentado un precedente al resolver una tutela, mediante sentencia T-967 de 2014, en la que cambió de jurisprudencia respecto de causales de divorcio. Ahora, los celos se considerarán como maltrato y acoso psicológico, dos causas que actualmente son motivo para pedir la separación. El caso de una mujer, a la que su pareja la celaba de manera patológica hizo que la Corte revaluara el tema. Ella pidió el divorcio, pero la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia lo negó argumentando que los celos no eran motivo para esto. Un juzgado de familia de Bogotá se había pronunciado en el mismo sentido.
Al llegar a la Corte Constitucional, esta se basó en convenciones de Naciones Unidas contra la violencia de género para revocar los dos fallos y conceder el amparo y protección que la afectada requería.