Vestirse con la maglia rossa y quedarse con ella hasta el 29 de mayo cuando en Turín se baje la bandera que señala el final del Giro de Italia, una de las tres competencias ciclísticas más importantes del mundo, es el objetivo de los seis escarabajos que tomarán la partida mañana en la localidad de Apeldoorn, Holanda.
Son seis los colombianos los que estarán en la línea de partida para una contrarreloj de 9,8 kilómetros, pero las miradas recaen sobre Rigoberto Urán, a quien en dos oportunidades el título le ha sido esquivo, y Esteban Chaves, el Chavito, quien luego de lo hecho en la Vuelta a España el año pasado, llega como jefe de filas de su equipo.
El Giro de Italia, en su edición 99, parece hecho a la medida de los colombianos, como lo fue hace dos años cuando Nairo Quintana se puso de ruana la competencia y se alzó con la victoria.
Mañana Nairo no tomará la partida porque su prioridad es el Tour de Francia, para el que se ha venido preparando con la idea puesta en vestirse de amarillo y celebrar a lo grande, después de ocupar en dos ocasiones el segundo lugar.
Los grandes rivales de los colombianos en la disputa por la corona son el Tiburón Vincenzo Nibali, Tom Dumoulin y Alejandro Valverde, quien tendrá a su lado a Carlos Bananito Betancur.
Betancur fue confirmado por el Movistar junto al costarricense Andrey Amador (cuarto en 2015), Giovanni Visconti (ganador de los premios de montaña), Rory Sutherland, Jasha Sütterlin, Javi Moreno, José Joaquín Rojas y José Herrada.
Tras 15 años en el pelotón profesional, Valverde correrá por primera vez en la gran vuelta por etapas en Italia y lo hace en un buen momento de forma como demostró en su reciente victoria en la Flecha Valona.
Valverde, de 36 años, ha corrido 18 grandes vueltas por etapas. Ganador de la Vuelta a España en 2009, el murciano subió al podio del Tour el pasado año (3º).
Además de Urán (Cannondale), Chaves (Orica GreenEDGE) y Betancur (Movistar), estarán en competencia Darwin Atapuma (BMC Racing), Sebastián Henao (Team Sky) y Daniel Martínez (Willier - Southeast).
El Giro de este año comienza por 12ª vez desde el extranjero. Después del inicio de Países Bajos con una contrarreloj individual y dos etapas llanas, se trasladará a Catanzaro.
Una gran ventaja para los escaladores nacionales es que esta edición no contempla contrarreloj por equipos, aunque sí una individual mañana de 9,8 kilómetros y otras dos individuales.
Para el Orica, equipo de Chaves, el velocista australiano Caleb Ewan, será, además, la carta para luchar por las etapas planas.
Vencedor de dos etapas y quinto en la clasificación final de la Vuelta a España, Chaves, de 26 años, participará por segunda vez en el Giro de Italia (55º en 2015).
“Es la primera vez en la historia del equipo que tenemos a un ciclista con posibilidades reales de concurrir por la clasificación general”, declaró el director deportivo, Matt White.
“Estos últimos años hemos conocido el éxito de otra manera, con victorias de etapa y camisetas de líder”, señaló White.
“Esteban se ha preparado muy bien. Podemos ofrecerle un verdadero apoyo. La experiencia de nuestros ciclistas españoles Rubén (Plaza) y Amets (Txurruka) contará en las etapas de montaña”, añadió Matt White.
En la disputa del título los corredores deberán tener en cuenta etapas que serán clave, como la sexta, entre Ponte – Rocarasso, prevista para el 12 de mayo, por cuanto el grupo tendrá que encarar el ascenso a Bocca della Selva (18 kilómetros al 5,6%) y la subida final a Rocarasso (19 km. al 4,8%), donde posiblemente se hagan las primeras grandes diferencias de este Giro.
Dos días después la de Foligno – Arezzo, cuyos últimos 30 kilómetros presentan grandes dificultades en la subida al Alpe Di Potti, ascenso de segunda categoría de 8,6 kilómetros al 6,5% y que se corona a 20 kilómetros de meta.
La de Campi Bisenzio – Sestola, el 17 de mayo, que es una de las más largas de la carrera, con 219 kilómetros de recorrido y con final en subida.
Otra fracción exigente es la de Palmanova - Cividale del Friuli, el 20 de mayo, con subida a dos puertos de montaña de segunda categoría.
Y, Alpago – Corvara, el 21 de mayo, considerada como la etapa reina, con 210 kilómetros de trazado y paso por los Dolomitas y con un desnivel total de 5.400 metros.
Para los colombianos será clave no perder tiempo frente a los demás favoritos al título en las etapas llanas y, ante todo, estar atentos a los movimientos dentro del pelotón cuando se presenten ataques en los que haya rivales fuertes y a los cortes, generalmente provocados por el viento.
Chaves y Urán enfocaron su preparación para esta carrera y llegan con optimismo pleno, pero no hay que olvidar que en una prueba tan larga juegan papel preponderante otros factores, así que habrá que esperar que no sufran caídas o enfermedades que minen sus fuerzas.