Los Gigantes de Nueva York se llevaron el Superbowl 46 del football estadounidense de la NFL, al vencer a los Patriotas de Nueva Inglaterra con marcador de 21-17, en partido efectuado en el Lucas Oil de Indianápolis.
Este fue el segundo anillo de Superbowl del quarterbacks Eli Manning, quien ya había logrado uno en el 2008, cuando también vencieron a los Patriotas. El estelar mariscal fue elegido el MVP (Jugador Más Valioso) del partido.
Este fue el sexto triunfo de los Gigantes al hilo, incluido cuatro de playoffs, pues ya habían derrotado a Atlanta, a los entonces campeones defensores Green Bay y los San Francisco 49ers.
Ahmad Bradshaw corrió seis yardas con 57 minutos por jugar para anotar el touchdown decisivo.
Este fue el cuarto Superbowl de los Gigantes, que ya habían ganado las ediciones del 2008, 1991 y 1987.
El puertorriqueño Víctor Cruz pudo bailar salsa -lo hace cada vez que anota- en el mismo primer cuarto, cuando llegó a la zona de anotación tras un pase del mariscal Manning de dos yardas, jugada que completó el kicker Lawrence Tynes con su pateo, que puso el marcador en ese momento 9-0 a su favor.
El novato Cruz venía de una excelente temporada, en la que tuvo 1.539 yardas y 9 touchdown.
Por su parte, Manning, un quarterback muy eficiente en el ataque terrestre, había terminado un temporada con 4.923 yardas en pases y 29 touchdown.
Al principio del segundo cuarto, los Patriotas aprovecharon un pateo de Stephen Gostkowski de 29 yardas, para acercar el marcador 9-3.
Posteriormente, faltando solamente ocho segundos para finalizar el segundo parcial, el quarterbacks de los Patriotas, Tom Brady, se conectó cómodamente a cuatro yardas con Danny Woodhead para empatar el partido. Este fue el pase de touchdown número 37 de Brady en un desafío de playoffs.
Acto seguido, Gostkowski completó la jugada con su pateo y los Patriotas se fueron al frente por primera vez con marcador de 10-9.
Al comienzo del tercer cuarto, con solamente tres minutos jugados de ese período, Brady volvió a efectuar un pase de 12 yardas para el también boricua Aaron Hernández y conseguir el touchdown, jugada que completó el kicker Gostkowski, para ampliar la cuenta de los Patriotas a 17-9.
El kicker Lawrence Tynes después acercó a los Gigantes 17-12 con un pateo de 38 yardas con 6:43 por jugar del tercer cuarto.
Faltando después menos de un minuto de ese período, Manning fue derribado por tercer vez en el partido a solamente 10 yardas del área de anotación. En el pateo de 33 yardas de Tynes pudieron marcar tres puntos y acercarse 17-15.
Al comienzo del cuarto parcial Brady fue interceptado por Blakburn, dándole el ovoide a los Gigantes, quienes después, con menos de un minuto por jugar, se fueron arriba definitivamente 21-17 con la corrida de seis yardas de Bradshaw.
El mariscal Brady, un quarterback muy efectivo en el ataque aéreo, dejó ahora su balance en partidos de Super Tazón en 3-2, pues tiene tres anillos de estos encuentros.
Los Patriotas, que fueron el segundo mejor equipo en la temporada regular en ofensiva, no pudieron lograr su cuarto trofeo (2002, 2004, 2005).
La actividad musical del medio tiempo estuvo a cargo de Madonna, con un espectacular show de cuatro canciones, con excelente escenografía y derroche técnico y de luces propio de estos eventos todo los años, que esta ocasión se estima que lo vieran unos 110 millones de telespectadores en Estados Unidos.
Antes del comienzo del partido fueron Kelly Clarkson, Miranda Lambert y Blake Shelton quienes abrieron la actividad con un inicio musical.
Las estrellas de música country Shelton y Lambert ejecutaron una versión de "America the Beautiful" y Clarkson cantó con orgullo el himno nacional de Estados Unidos.
Se considera que este es el partido más lucrativo del año en el deporte estadounidense, pues animará la economía de la tranquila Indianápolis con un caudal de 150 millones de dólares.
/AFP