Numerosos indígenas de Colombia, Bolivia, Ecuador y Perú alzaron su voz de protesta y denuncia en Bogotá en contra de los atropellos y genocidios de los que han sido víctimas en el continente.
 

Los aborígenes se dieron cita en el III Congreso Ordinario de la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (Caoi), desde donde dijeron que los gobiernos de turno también vulneran sus derechos, incluido el supremo que es el de la vida.
 

En tal sentido acusaron al gobierno de Bolivia, presidido por Evo Morales, de permitir que una empresa minera pretenda explotar la riqueza de la zona en la que habitan los indígenas Mallku Cota en Potosí, contaminando además el agua que usan para cultivar la tierra.