El martes, cuando se juega el partido por Copa Libertadores entre Santa Fe y Cerro Porteño será la prueba de fuego para establecer si el alquiler del estadio El Campín para conciertos perjudica o no el gramado para el fútbol.

Ayer, el director del Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD), Javier Suárez Alonso, concluyó que el terreno de juego no sufrió mayor afectación después del concierto que se celebró el sábado.

“Lo que estamos realizando es un mantenimiento posterior al ‘Concierto de Conciertos’. Estamos absolutamente seguros que para el martes, fecha del partido por Copa Libertadores entre Santa Fe y Cerro Porteño la cancha estará apta para el encuentro”, dijo el funcionario en medio de una inspección pública al escenario.

Suárez agregó: “no tenemos afectaciones a primera vista y creemos que con los protocolos que hemos seguido, el informe de la Universidad Distrital, que será entregado en dos semanas sobre el estado de la gramilla será positivo”.

Suárez recalcó que el Instituto sigue un protocolo muy estricto, que exige mucho en materia de requerimientos y costos al empresario o empresarios que quieran usar el estadio para conciertos.

“Tomamos todas las precauciones para evitarle daños al estadio, y así poder garantizar que se realicen los conciertos y eventos culturales, cumpliendo con la ley de espectáculos públicos, además de brindar las garantías necesarias para que los equipos tradicionales de Bogotá, Santa Fe y Millonarios jueguen sus partidos en condición de locales”, indicó el director del IDRD.

Y es que desde el 21 de marzo, momentos antes de instalar la cubierta para la gramilla del estadio Nemesio Camacho ‘El Campín’, usada en el concierto de conciertos, personal del IDRD, Equiver (contratista del mantenimiento de la gramilla) y la Universidad Distrital siguen el protocolo y las recomendaciones para mitigar el impacto que sufre la gramilla en estos eventos.

De acuerdo con los conceptos emitidos por los ingenieros agrónomos, desde ayer se realizan los procesos para la mitigación del impacto que sufre la gramilla a cargo del contratista y responsabilidad del organizador del evento.

Entre tanto, anterior y posterior al evento se han tomado muestras de la gramilla con el fin de verificar y comparar el antes y después del evento y así determinar su afectación en aspectos técnicos como permeabilidad, densidad, porosidad, topografía y asentamiento del terreno, condiciones que a simple vista no se evidencian y las cuales serán analizadas por expertos de la Universidad Distrital, quienes serán los encargados de determinar si se superaron los niveles establecidos en el contrato interadministrativo.