El papa Benedicto XVI hizo este miércoles durante la audiencia general un balance positivo de su reciente viaje a Cuba y México, con el que espera contribuir a que América Latina alcance "un futuro mejor", marcado sobre todo por "la paz".
Con la visita "quise abrazar idealmente a todo el continente latinoamericano con la esperanza de contribuir al compromiso concreto de caminar hacia un futuro mejor", aseguró ante los cerca de 11.000 peregrinos congregados en la plaza de San Pedro bajo un sol primaveral.
"Que el pueblo mexicano y cubano puedan obtener frutos abundantes de la visita para construir en la comunión eclesial y con valentía evangélica un futuro de paz", afirmó.
El Papa, que cumplirá 85 años de edad el 16 de abril, no sólo parecía en buena forma física sino que manifestó su satisfacción por el viaje a México y Cuba, realizado del 23 al 28 de marzo, durante el cual fue recibido por los presidentes de los dos países y ovacionado por multitudes.
"Han sido días inolvidables, de alegría y de esperanza, que permanecerán marcados en mi corazón", subrayó el pontífice.
"Realicé el viaje para confirmar en la fe, la esperanza y la caridad a los hijos e hijas de esos dos amados pueblos", explicó.
"Agradezco a las autoridades de cada uno de esos países, así como a sus pastores y fieles, la acogida y muestras de bondad que me han dispensado en los días de mi visita, que nunca olvidaré", agregó.
"En los diversos encuentros y celebraciones litúrgicas no dejé de exhortar a todos a crecer en la alegría de ser cristianos y pertenecer a la Iglesia, a la vez que hacía una encarecida exhortación a reconocer y tutelar los derechos fundamentales de la persona humana", subrayó.
"Animé también a confiar en la bondad de Dios, que puede cambiar las situaciones insoportables y oscuras, alentando igualmente a vivir en el empeño concreto de caminar unidos hacia un futuro mejor", reiteró.
AFP