Ecuador anunció que mantendrá el "tiempo que sea necesario" el asilo otorgado a Julian Assange, refugiado en su embajada en Londres, tras la decisión de la justicia sueca de ratificar orden de arresto por agresión sexual contra el fundador de WikiLeaks.
El gobierno de Ecuador "declara la vigencia del asilo concedido a Julian Assange, y se reafirma en su intención de mantener esta protección el tiempo que sea necesario, hasta que Julian Assange llegue a un lugar seguro", señaló la cancillería en un comunicado.
El jueves, el tribunal de apelación de Estocolmo rechazó un pedido de anulación de la orden de arresto contra Assange, alegando el "importante" riesgo de fuga del experto informático australiano.
Assange es requerido por la justicia sueca por supuestas agresiones sexuales a dos mujeres, cargos que él niega.
El caso se remonta a 2010, cuando el fundador del portal de filtraciones WikiLeaks fue acusado de violación y acoso sexual en la región de Estocolmo.
El australiano se refugió en la embajada de Ecuador en Londres hace dos años y cinco meses. Quito le concedió después el asilo político por considerar que es víctima de una persecución y que su vida está en riesgo.
El ciberactivista rehúsa viajar al país escandinavo porque cree que podría ser entregado a Estados Unidos, donde teme ser juzgado por la filtración de 250.000 cables diplomáticos y 500.000 informes militares confidenciales que pusieron en aprietos a la diplomacia estadounidense.
Tras ratificar el asilo a Assange, el gobierno ecuatoriano insistió en su oferta de cooperación con la justicia sueca para resolver el caso.
"Ecuador mantiene su invitación a que funcionarios suecos visiten su embajada en Londres para que se tome declaración a Julian Assange, o bien se utilicen medios telemáticos (videoconferencia) para ello. Ambas posibilidades están contempladas de forma explícita en la legislación procesal vigente en Suecia y en la Unión Europea", indicó en el comunicado.
El experto informático, quien según Ecuador ha enfrentado quebrantos de salud debido al prolongado encierro en la sede diplomática, corre el riesgo de salir, ser arrestado por la policía británica y entregado a Suecia/AFP.